Tras un mínimo de 198 puntos básicos (es decir, 1,98% sobre el rinde para letras de la Tesorería norteamericana a diez años), el diferencial cerró en 205. Igualmente, es el menor desde los años 70. Según JP Morgan Cahse, que elabora las estadísticas, durante 2006 el riesgo soberano cediò 287 puntos. Ningún gurú del mercado local salió a opinar.
Al finalizar el año, pues, Argentina estaba algo por encima de Turqupia (203) o Brasil (193). Continúa algo distante de Venezuela (la potencia petrolera exhibe 177 puntos), Uruguay (sus 176 puntos reflejan la plaza financiera extraterritorial, no la realidad), Méjico (101), Rusia (otra potencia en hidrocarburos, 96) y Chilke (88, gracias a las exportaciones de cobre).
En cuanto a vehículos, la Asociación de fábricas automotrices de Argentina (Adefa) estaba por difundir cifras según las cuales se colocaron en 2006 alrededor de 452.500 unidades. O sea, 16% sobre las 390.250 del año anterior. Sumando nuevos y usados, la venta orillaba 1.690.400 unidades, el máximo absoluto.
A criterio de cifras entregadas por las empresas, el Volkswagen Gol sigue al frente con casi 42.950 vehículos, es decir 10,8% del mercado en 2006. Lo siguen el Chevrolet Corsa (36.100, 9,1%) y el Peugeoit 206 (24.700, 6,2%). A diferencia de la Unión Europea, Brasil, China e India, Argentina no produce -como en los años 50 y 60- coches al alcance de la clase media baja. Tal vez la llegada de la alianza Fiat-Tata o el Chery QQ chino –que piensa comercializar Francesco Macri- camibie algo ese panorama.
Tras un mínimo de 198 puntos básicos (es decir, 1,98% sobre el rinde para letras de la Tesorería norteamericana a diez años), el diferencial cerró en 205. Igualmente, es el menor desde los años 70. Según JP Morgan Cahse, que elabora las estadísticas, durante 2006 el riesgo soberano cediò 287 puntos. Ningún gurú del mercado local salió a opinar.
Al finalizar el año, pues, Argentina estaba algo por encima de Turqupia (203) o Brasil (193). Continúa algo distante de Venezuela (la potencia petrolera exhibe 177 puntos), Uruguay (sus 176 puntos reflejan la plaza financiera extraterritorial, no la realidad), Méjico (101), Rusia (otra potencia en hidrocarburos, 96) y Chilke (88, gracias a las exportaciones de cobre).
En cuanto a vehículos, la Asociación de fábricas automotrices de Argentina (Adefa) estaba por difundir cifras según las cuales se colocaron en 2006 alrededor de 452.500 unidades. O sea, 16% sobre las 390.250 del año anterior. Sumando nuevos y usados, la venta orillaba 1.690.400 unidades, el máximo absoluto.
A criterio de cifras entregadas por las empresas, el Volkswagen Gol sigue al frente con casi 42.950 vehículos, es decir 10,8% del mercado en 2006. Lo siguen el Chevrolet Corsa (36.100, 9,1%) y el Peugeoit 206 (24.700, 6,2%). A diferencia de la Unión Europea, Brasil, China e India, Argentina no produce -como en los años 50 y 60- coches al alcance de la clase media baja. Tal vez la llegada de la alianza Fiat-Tata o el Chery QQ chino –que piensa comercializar Francesco Macri- camibie algo ese panorama.
