Los datos van en consonancia con una leve recuperación de la economía. La inflación, como principal factor de desaliento.
En línea con la recuperación del 0,3% interanual del PBI, lo que evidencia el pasaje de un contexto recesivo a otro de leve crecimiento, un 67% de los encuestados contestó que planea realizar inversiones en los próximos 12meses, mientras que sólo un 18% respondió negativamente y el restante 15% aún no lo decidió, por lo que el porcentaje positivo podría incrementarse.
Asimismo, el 64% de quienes contestaron por la afirmativa manifestaron que dichas inversiones serán iguales o mayores a las que han efectuado en el año previo. En su mayoría, se concentrarán en una combinación de bienes tangibles e intangibles, tanto de origen nacional como importado. A su vez, el 80% de los encuestados señaló que las inversiones en las industrias a las que pertenecen serán iguales o mayores a las realizadas en el año inmediato anterior.
Además, de la encuesta se desprende que buena parte de estas inversiones se traducirá en la creación de nuevas fuentes de trabajo, ya que el 31% afirmó que necesitará de más personal para concretarlas. No obstante, el 54% respondió que encuentra inconvenientes para encontrar personal con la capacitación necesaria.
Al ser consultados sobre el origen de los bienes en los que planean invertir, el 31% se inclinó por lo nacional, el 23% por importados y el 46% restante por ambas opciones.
Respecto a cómo evolucionarán las inversiones en la industria a la que pertenecen durante el lapso de un año, el 54% consideró que se mantendrán estables, el 26% estimó que crecerá y el restante 20% evaluó que disminuirán.
Bajo acceso al sistema financiero
De acuerdo a la misma encuesta, mientras que un 51% expresó que espera en sus futuras inversiones una rentabilidad que alcanzaría el 10% anual o más, el restante 49% manifestó que la misma se ubicaría por debajo del nivel antes citado.
En cuanto a las fuentes de financiación de las inversiones, se evidenció que aún resulta muy escaso el uso de los canales formales como sistema financiero y mercado de capitales, ya que el 41% dijo que utilizará recursos propios en tanto que el 49% manifestó que lo hará mediante una combinación de varias fuentes.
Por último, el 85% de los encuestados coincidió en que la inflación desalienta la llegada de inversiones. En tal sentido, es posible suponer que, en la medida en que la inflación vaya cediendo gradualmente, la propensión a invertir aumente de forma progresiva.