Telefónica: renunció Villalonga

Tal como estaba previsto, el consejo de administración (directorio) de Telefónica anunció hoy (miércoles 26) el alejamiento del presidente mundial del grupo, Juan Villalonga, y su reemplazo por César Alierta, hasta ahora presidente de la tabacalera franco-española Altadis.

La novedad, según un despacho de la agencia noticiosa española EFE, que aclara que la información no fue confirmada oficialmente, es que Villalonga recibirá por su renuncia US$ 28 millones.

Villalonga, de 47 años, accedió a la presidencia de Telefónica en 1996, tras la llegada al poder del Partido Popular (PP) que lidera el jefe del gobierno español, José María Aznar, con quien mantenía entonces una estrecha amistad, según EFE.

Meses atrás, Villalonga fue acusado por un diario español de haberse enriquecido en operaciones bursátiles gracias al uso de información privilegiada, en 1998.

Aunque Telefónica negó que ello fuera cierto, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (el organismo español regulador de la actividad bursátil, equivalente a la Comisión Nacional de Valores argentina) inició una investigación sobre el caso.

A partir de entonces se hicieron constantes los rumores –puntualmente desmentidos por la compañía– sobre el alejamiento de Villalonga debido a fuertes presiones empresarias, particularmente de varios de los poderosos grupos accionistas de Telefónica.

Según informó la agencia noticiosa Reuters, Alierta no tendrá funciones ejecutivas, razón por la cual se nombrará “al menos” un consejero delegado (director ejecutivo).

El diario español especializado en economía y negocios Cinco Días, en cambio, señala en su edición de hoy que el consejo de administración de Telefónica “nombrará probablemente a varios consejeros delegados que se encargarán de gestionar el día a día de las diferentes unidades de negocios del grupo”.

Entre los candidatos a esas funciones señala a Luis Lada, actual consejero delegado de Telefónica Móviles España, y a Fernando Abril, ex presidente financiero de Telefónica.

Alierta se impuso al representante del grupo financiero La Caixa en el directorio de Telefónica, Isidro Fainé. Eran los dos únicos candidatos, ya que sólo ellos cumplían el requisito estatutario de llevar más de tres años en el directorio para acceder a la presidencia.

Alierta nació en Zaragoza el 5 de mayo de 1945. Se graduó en Derecho en su ciudad natal y luego obtuvo un MBA en la Universidad de Columbia (Nueva York).

En 1970 ingresó como analista financiero en el Banco Urquijo, donde permaneció hasta 1985. Entonces era director del área de mercados de capitales.

Tras dejar el Urquijo fundó la sociedad de bolsa Beta Capital, de la que es principal accionista, presidente y consejero delegado.

En diciembre de 1991 asumió como presidente de la Asociación Española del Mercado de Valores. Dejó ese puesto en junio de 1996 para asumir como presidente de la entonces empresa estatal Tabacalera, de la cual condujo su privatización, primero, y su fusión con la francesa Seita, de la cual resultó Altadis.

Tal como estaba previsto, el consejo de administración (directorio) de Telefónica anunció hoy (miércoles 26) el alejamiento del presidente mundial del grupo, Juan Villalonga, y su reemplazo por César Alierta, hasta ahora presidente de la tabacalera franco-española Altadis.

La novedad, según un despacho de la agencia noticiosa española EFE, que aclara que la información no fue confirmada oficialmente, es que Villalonga recibirá por su renuncia US$ 28 millones.

Villalonga, de 47 años, accedió a la presidencia de Telefónica en 1996, tras la llegada al poder del Partido Popular (PP) que lidera el jefe del gobierno español, José María Aznar, con quien mantenía entonces una estrecha amistad, según EFE.

Meses atrás, Villalonga fue acusado por un diario español de haberse enriquecido en operaciones bursátiles gracias al uso de información privilegiada, en 1998.

Aunque Telefónica negó que ello fuera cierto, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (el organismo español regulador de la actividad bursátil, equivalente a la Comisión Nacional de Valores argentina) inició una investigación sobre el caso.

A partir de entonces se hicieron constantes los rumores –puntualmente desmentidos por la compañía– sobre el alejamiento de Villalonga debido a fuertes presiones empresarias, particularmente de varios de los poderosos grupos accionistas de Telefónica.

Según informó la agencia noticiosa Reuters, Alierta no tendrá funciones ejecutivas, razón por la cual se nombrará “al menos” un consejero delegado (director ejecutivo).

El diario español especializado en economía y negocios Cinco Días, en cambio, señala en su edición de hoy que el consejo de administración de Telefónica “nombrará probablemente a varios consejeros delegados que se encargarán de gestionar el día a día de las diferentes unidades de negocios del grupo”.

Entre los candidatos a esas funciones señala a Luis Lada, actual consejero delegado de Telefónica Móviles España, y a Fernando Abril, ex presidente financiero de Telefónica.

Alierta se impuso al representante del grupo financiero La Caixa en el directorio de Telefónica, Isidro Fainé. Eran los dos únicos candidatos, ya que sólo ellos cumplían el requisito estatutario de llevar más de tres años en el directorio para acceder a la presidencia.

Alierta nació en Zaragoza el 5 de mayo de 1945. Se graduó en Derecho en su ciudad natal y luego obtuvo un MBA en la Universidad de Columbia (Nueva York).

En 1970 ingresó como analista financiero en el Banco Urquijo, donde permaneció hasta 1985. Entonces era director del área de mercados de capitales.

Tras dejar el Urquijo fundó la sociedad de bolsa Beta Capital, de la que es principal accionista, presidente y consejero delegado.

En diciembre de 1991 asumió como presidente de la Asociación Española del Mercado de Valores. Dejó ese puesto en junio de 1996 para asumir como presidente de la entonces empresa estatal Tabacalera, de la cual condujo su privatización, primero, y su fusión con la francesa Seita, de la cual resultó Altadis.