Shell y Apache, de compras en Nueva Zelanda
La petrolera angloholandesa y su socia norteamericana desembolsaron US$ 1.670 millones para controlar la división energética de Fletcher Challenge, una de las más grandes del sector en aquel país.
7 marzo, 2001
(EFE).- La compañía anglo holandesa Shell y Apache, su socio estadounidense, lograron hacerse con la división energética de Fletcher Challenge, la mayor empresa del sector petrolero de Nueva Zelanda.
La petrolera espera concluir la operación a final de este mes, según un portavoz de Shell.
Shell pagará conjuntamente con su socio norteamericano US$ 3,55 por acción, un total de US$ 1.670 millones, de los que la compañía anglo holandesa abonará US$ 1.030 millones.
El consorcio Peak Petroleum intentó la semana pasada sobrepasar la oferta de Shell, pero no lo logró.
Fletcher Challenge Energy es la mayor compañía de petróleo y gas de Nueva Zelanda, cuyas autoridades exigieron como condición para aprobar la operación que Shell y Apache se deshicieran de algunas gasolineras, refinerías y yacimientos.
Mediante la operación Shell controlará yacimientos de petróleo y gas en Nueva Zelanda y el sultanato de Brunei y los norteamericanos tendrán los de la empresa neozelandesa en Cánada y la Argentina.
(EFE).- La compañía anglo holandesa Shell y Apache, su socio estadounidense, lograron hacerse con la división energética de Fletcher Challenge, la mayor empresa del sector petrolero de Nueva Zelanda.
La petrolera espera concluir la operación a final de este mes, según un portavoz de Shell.
Shell pagará conjuntamente con su socio norteamericano US$ 3,55 por acción, un total de US$ 1.670 millones, de los que la compañía anglo holandesa abonará US$ 1.030 millones.
El consorcio Peak Petroleum intentó la semana pasada sobrepasar la oferta de Shell, pero no lo logró.
Fletcher Challenge Energy es la mayor compañía de petróleo y gas de Nueva Zelanda, cuyas autoridades exigieron como condición para aprobar la operación que Shell y Apache se deshicieran de algunas gasolineras, refinerías y yacimientos.
Mediante la operación Shell controlará yacimientos de petróleo y gas en Nueva Zelanda y el sultanato de Brunei y los norteamericanos tendrán los de la empresa neozelandesa en Cánada y la Argentina.