Oracle nombra candidatos para el directorio de PeopleSoft
Lawrence Ellison abre otro frente en la guerra por quedarse con PeopleSoft-JD Edwards y quizás- acabar con ella. En efecto, designó directores propios, desconociendo el mandato de la junta existente, y los presentará en la próxima asamblea.
Si, llegado el caso, todos los candidatos de Oracle son elegidos en esa oportunidad (fines de marzo), el nuevo directorio tendrá facultades para eliminar la “píldora envenenada”. Este mecanismo le permite a una empresa atacada emitir más acciones para frustrar la toma, en parrticular una tan agresiva –por momentos, inexplicable- como la encarada por Ellison.
En general, se esperaba una batalla por interpósitas personas para controlar la junta. Pero soprendió que la lista de nombres haya sido presentada ante la Comisión Federal de Valores apenas horas después de radicar una demanda, en Delaware, para desarmar esa misma píldora.
El juez a cargo, Leo Strine, fijó plazo hasta el 14 de diciembre para escuchar testimonios. Luego, tal vez se tome la pausa de fiestas y resueleva después del 6 de enero. Eso explica la movida de Ellison proponiendo ya sus directores: como se sabe, Strine no suele dictaminar en favor de este tipo de demandas. Entretanto, PeopleSoff podría emitir acciones suficientes para diluir el 60% de vendedores potenciales reclutados por Ellison.
La cuestión es complicada. Meses atrás, Ellison había designado cinco eventuales directores, sobre los ocho que totalizan la junta actual. Pero debió retirarlos porque, en ese momento, el deaprtamento federal de Justicia estaba demandándalo por presunta maniobra para restringir la competencia. Sorpresivante, testimonios favorables de Microsoft y otras firmas le dieron el triunfo a Oracle.
En esta oportunidad, Ellison propone cuatro de aquellos cinco candidatos iniciales. Ocurre que, tras el despido de Craig Conway, el directorio quedó reducido a siete miembros. Se trata de Duke Bristow –analista de mercado-, Roger Noall (ejecutivo jubilado), Arhur Raviv (docente universitario) y Laurence Paul (Laurel Crown Capital). Dado que los tres primeros son meros títeles de Ellison, Wall Street sosepcha que le meta final de la toma es liquidar PeopleSof-JD Edwards y sus marcas.
Si, llegado el caso, todos los candidatos de Oracle son elegidos en esa oportunidad (fines de marzo), el nuevo directorio tendrá facultades para eliminar la “píldora envenenada”. Este mecanismo le permite a una empresa atacada emitir más acciones para frustrar la toma, en parrticular una tan agresiva –por momentos, inexplicable- como la encarada por Ellison.
En general, se esperaba una batalla por interpósitas personas para controlar la junta. Pero soprendió que la lista de nombres haya sido presentada ante la Comisión Federal de Valores apenas horas después de radicar una demanda, en Delaware, para desarmar esa misma píldora.
El juez a cargo, Leo Strine, fijó plazo hasta el 14 de diciembre para escuchar testimonios. Luego, tal vez se tome la pausa de fiestas y resueleva después del 6 de enero. Eso explica la movida de Ellison proponiendo ya sus directores: como se sabe, Strine no suele dictaminar en favor de este tipo de demandas. Entretanto, PeopleSoff podría emitir acciones suficientes para diluir el 60% de vendedores potenciales reclutados por Ellison.
La cuestión es complicada. Meses atrás, Ellison había designado cinco eventuales directores, sobre los ocho que totalizan la junta actual. Pero debió retirarlos porque, en ese momento, el deaprtamento federal de Justicia estaba demandándalo por presunta maniobra para restringir la competencia. Sorpresivante, testimonios favorables de Microsoft y otras firmas le dieron el triunfo a Oracle.
En esta oportunidad, Ellison propone cuatro de aquellos cinco candidatos iniciales. Ocurre que, tras el despido de Craig Conway, el directorio quedó reducido a siete miembros. Se trata de Duke Bristow –analista de mercado-, Roger Noall (ejecutivo jubilado), Arhur Raviv (docente universitario) y Laurence Paul (Laurel Crown Capital). Dado que los tres primeros son meros títeles de Ellison, Wall Street sosepcha que le meta final de la toma es liquidar PeopleSof-JD Edwards y sus marcas.
