Novartis ejerce presiones sobre Aventis y el gobierno francés

En un gesto inédito, el director gerente (CEO) de la suiza Novartis, Daniel Vasella, dijo públicamente que la firma comprará la francesa Aventis si cuenta con su buena voluntad. Pero también le exige señales al gobierno de París.

24 marzo, 2004

Rompiendo una tradición entre presidentes ejecutivos europeos, Vasella también explicó por qué su compañía quiere absorber al competidor galo. Esto no suele hacerse antes de plantear una oferta formal o abrir negociaciones, cosas que aún no han ocurrido. Algunos observadores creen que todo forma parte de una “estrategia de apriete” orientada al gobierno francés.

París, en verdad, preferiría una fusión entre dos firmas nacionales. Para el caso, Aventis y Sanofi-Synthélabo, según los términos de la oferta presentada meses atrás por la segunda (€ 46.000 millones). El gobierno no quisiera un matrimonio Novartis-Aventis, porque crearía la segunda farmoquímica del mundo, detrás de la norteamericana Pfizer.

Pero, además, esa dupla tendría la mayor línea internacional de especialidades para diabetes, cáncer y males cardiovasculares. Precisamente, éste es el argumento principal de Vasella: “En esos rubros, seríamos más fuertes en todos los mercados, inclusive la Unión Europea, Estados Unidos y Japón”.

Como es obvio, la ofensiva de Novartis –si cristaliza en una propuesta concreta- complicará los intentos de Sanofi para quedarse con Aventis, una compañía más grande que ella. Al entrar “oficialmente” en escena, Novartis declaró que sólo comenzará a negociar si media invitación formal del directorio de Aventis y el gobierno asume una postura por lo menos neutral”.

Vasella reveló haber conversado ya con Igor Landau, CEO de Aventis. Al parecer, éste le pidió un estudio de factibilidad con vistas a la fusión. Resta, empero, una incógnita clave: ¿cuánto ofrecerá Novartis?

Rompiendo una tradición entre presidentes ejecutivos europeos, Vasella también explicó por qué su compañía quiere absorber al competidor galo. Esto no suele hacerse antes de plantear una oferta formal o abrir negociaciones, cosas que aún no han ocurrido. Algunos observadores creen que todo forma parte de una “estrategia de apriete” orientada al gobierno francés.

París, en verdad, preferiría una fusión entre dos firmas nacionales. Para el caso, Aventis y Sanofi-Synthélabo, según los términos de la oferta presentada meses atrás por la segunda (€ 46.000 millones). El gobierno no quisiera un matrimonio Novartis-Aventis, porque crearía la segunda farmoquímica del mundo, detrás de la norteamericana Pfizer.

Pero, además, esa dupla tendría la mayor línea internacional de especialidades para diabetes, cáncer y males cardiovasculares. Precisamente, éste es el argumento principal de Vasella: “En esos rubros, seríamos más fuertes en todos los mercados, inclusive la Unión Europea, Estados Unidos y Japón”.

Como es obvio, la ofensiva de Novartis –si cristaliza en una propuesta concreta- complicará los intentos de Sanofi para quedarse con Aventis, una compañía más grande que ella. Al entrar “oficialmente” en escena, Novartis declaró que sólo comenzará a negociar si media invitación formal del directorio de Aventis y el gobierno asume una postura por lo menos neutral”.

Vasella reveló haber conversado ya con Igor Landau, CEO de Aventis. Al parecer, éste le pidió un estudio de factibilidad con vistas a la fusión. Resta, empero, una incógnita clave: ¿cuánto ofrecerá Novartis?

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