Fallo a favor de los juegos de azar
El juez Guglielmino rechazó un pedido de medida cautelar para frenar la instalación de máquinas tragamonedas en la Ciudad.
(NA). – El juez en lo Contencioso Administrativo Osvaldo Guglielmino rechazó una medida cautelar solicitada por un abogado para que se impidiera la instalación de máquinas tragamonedas en agencias oficiales y salas de bingo de la Capital Federal, según se informó hoy (lunes 10) en Tribunales.
De esta manera, el magistrado no hizo lugar a un pedido promovido en junio último por el abogado Ricardo Monner Sans, y rechazó el tercer recurso de esta índole que trató de detener la instalación de las máquinas.
Anteriormente, la Justicia había rechazado otros dos recursos que se interpusieron en torno a esta cuestión.
Según el fallo conocido hoy, el juez entendió que “puede pensarse que la propensión al juego aumenta en la misma proporción en que decrece la situación económica del que participa en aquél”, y aclaró que se refería a los “juegos de azar en que puedan hacerse apuestas muy pequeñas”.
Además, Guglielmino destacó que “no hay un razonamiento lo suficientemente seguro como para considerarlo verosímil que permita afirmar, por ahora, que la modalidad que el actor critica vaya a intensificar aquel hábito y fenómeno social”.
Asimismo, expresó que “en la actualidad ya funcionan muchísimas variedades de juegos con aquellas características, algunas de las cuales se ofrecen en cualquier esquina de la ciudad”.
Guglielmino no compartió lo sostenido por el denunciante “en cuanto a que la proliferación de medios de juegos de apuestas va a afectar su interés legítimo en preservar su calidad de vida, al hacer lo propio con un ambiente sano y equilibrado”.
En tanto, criticó la constante referencia al término “democrático” por parte de Monner Sans y advirtió que “su abuso puede llegar a formar un camino que conduzca a la banalización de su significado”.
El denunciante había postulado que “la actitud del Poder Ejecutivo” al autorizar los tragamonedas “vulnera la Ley Nacional de Procedimientos Administrativos y el artículo 129 de la Constitución Nacional”, sobre el régimen de gobierno autónomo de la Ciudad de Buenos Aires.
“Que el Estado salga a incrementar sus ingresos por el lado del vicio del juego contradice principios morales”, había señalado el abogado.
El decreto que autorizó a las agencias de lotería, salas de bingo y “otras ajenas a las reguladas” por la normativa legal vigente lleva el número 494/01 y fue publicado en el Boletín Oficial del 3 de mayo último.
Por su parte, los jueces del mismo fuero María José Sarmiento y Guillermo Rossi también rechazaron medidas cautelares similares promovidas por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad.
(NA). – El juez en lo Contencioso Administrativo Osvaldo Guglielmino rechazó una medida cautelar solicitada por un abogado para que se impidiera la instalación de máquinas tragamonedas en agencias oficiales y salas de bingo de la Capital Federal, según se informó hoy (lunes 10) en Tribunales.
De esta manera, el magistrado no hizo lugar a un pedido promovido en junio último por el abogado Ricardo Monner Sans, y rechazó el tercer recurso de esta índole que trató de detener la instalación de las máquinas.
Anteriormente, la Justicia había rechazado otros dos recursos que se interpusieron en torno a esta cuestión.
Según el fallo conocido hoy, el juez entendió que “puede pensarse que la propensión al juego aumenta en la misma proporción en que decrece la situación económica del que participa en aquél”, y aclaró que se refería a los “juegos de azar en que puedan hacerse apuestas muy pequeñas”.
Además, Guglielmino destacó que “no hay un razonamiento lo suficientemente seguro como para considerarlo verosímil que permita afirmar, por ahora, que la modalidad que el actor critica vaya a intensificar aquel hábito y fenómeno social”.
Asimismo, expresó que “en la actualidad ya funcionan muchísimas variedades de juegos con aquellas características, algunas de las cuales se ofrecen en cualquier esquina de la ciudad”.
Guglielmino no compartió lo sostenido por el denunciante “en cuanto a que la proliferación de medios de juegos de apuestas va a afectar su interés legítimo en preservar su calidad de vida, al hacer lo propio con un ambiente sano y equilibrado”.
En tanto, criticó la constante referencia al término “democrático” por parte de Monner Sans y advirtió que “su abuso puede llegar a formar un camino que conduzca a la banalización de su significado”.
El denunciante había postulado que “la actitud del Poder Ejecutivo” al autorizar los tragamonedas “vulnera la Ley Nacional de Procedimientos Administrativos y el artículo 129 de la Constitución Nacional”, sobre el régimen de gobierno autónomo de la Ciudad de Buenos Aires.
“Que el Estado salga a incrementar sus ingresos por el lado del vicio del juego contradice principios morales”, había señalado el abogado.
El decreto que autorizó a las agencias de lotería, salas de bingo y “otras ajenas a las reguladas” por la normativa legal vigente lleva el número 494/01 y fue publicado en el Boletín Oficial del 3 de mayo último.
Por su parte, los jueces del mismo fuero María José Sarmiento y Guillermo Rossi también rechazaron medidas cautelares similares promovidas por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad.
