Confirmado: AT&T aprueba su división

La compañía se dividirá en cuatro empresas que operaran de forma independiente las comunicaciones inalámbricas, servicios de banda ancha, servicios a empresas y telefonía de larga distancia.

26 octubre, 2000

(EFE).- El consejo de administración del gigante estadounidense de las telecomunicaciones AT&T informó ayer (miércoles 25), que aprobó su división en cuatro compañías independientes.

Las cuatro nuevas compañías serán AT&T Wireless, encargada de las telecomunicaciones inalámbricas; AT&T Broadband, que comprenderá los servicios de banda ancha; AT&T Business, a cargo de los servicios a empresas; y AT&T Consumer, la actual división de servicios de telefonía de larga distancia a clientes particulares.

Las empresas compartirán la marca AT&T y mantendrán contratos entre ellas que les permitirán continuar proporcionando servicios en todos los sectores, aunque negociarán acciones propias y tendrán estructuras operacionales independientes.

El consejo de administración de AT&T aseguró que espera que el proceso de división de la empresa esté concluido en el año 2002.

AT&T Business, la división que genera más ingresos y ganancias en la actual estructura de la empresa, mantendrá el papel de sociedad matriz y será el continuador legal y bursátil de AT&T.

Esta división generó el año pasado US$ 25.000 millones en ventas, 39% de los ingresos de AT&T, y ganancias netas de US$ 9.200 millones, 46% de los beneficios totales de la compañía.

AT&T Business será también la matriz de la nueva AT&T Consumer, que tendrá a su cargo el negocio de larga distancia para clientes particulares, uno de los sectores que tiene más competencia y cuyos ingresos se han visto seriamente mermados en los últimos años.

Las acciones de AT&T Consumer serán llamadas acciones de seguimiento, es decir, que no implicarán la posesión física de activos, sino sólo participación en los beneficios del negocio.

AT&T Wireless y AT&T Broadband tendrán acciones y activos propios.

La operación, “creará una familia de cuatro proveedores de servicios a nivel nacional que estarán aún mejor equipados que hoy para entregar a las familias y empresas estadounidenses una nueva generación de servicios globales en comunicaciones y datos”, afirmó Michael Armstrong, presidente y director ejecutivo de AT&T.

Se espera que las empresas independientes tengan mayor flexibilidad para conseguir capital, innovar productos y servicios y establecer alianzas o comprar otras empresas.

Desde el lunes circulaban en Wall Street rumores sobre la posible división de AT&T, una operación que es vista positivamente por los analistas puesto que permite que los inversores concentren sus carteras en aquellos negocios más rentables.

Las acciones de AT&T venían sufriendo desde hace muchos meses los malos resultados de la división de telefonía de larga distancia, lo que impedía que se notaran los beneficios de los negocios de altos ingresos y rápido crecimiento, como los sectores de transmisión de datos y de banda ancha.

AT&T posee actualmente una acción de seguimiento de la división de telefonía inalámbrica, negocio del que aún es propietaria de 85%.

Los planes de la empresa son vender las acciones que aún tiene en su poder y más tarde dotar de independencia a la filial.

(EFE).- El consejo de administración del gigante estadounidense de las telecomunicaciones AT&T informó ayer (miércoles 25), que aprobó su división en cuatro compañías independientes.

Las cuatro nuevas compañías serán AT&T Wireless, encargada de las telecomunicaciones inalámbricas; AT&T Broadband, que comprenderá los servicios de banda ancha; AT&T Business, a cargo de los servicios a empresas; y AT&T Consumer, la actual división de servicios de telefonía de larga distancia a clientes particulares.

Las empresas compartirán la marca AT&T y mantendrán contratos entre ellas que les permitirán continuar proporcionando servicios en todos los sectores, aunque negociarán acciones propias y tendrán estructuras operacionales independientes.

El consejo de administración de AT&T aseguró que espera que el proceso de división de la empresa esté concluido en el año 2002.

AT&T Business, la división que genera más ingresos y ganancias en la actual estructura de la empresa, mantendrá el papel de sociedad matriz y será el continuador legal y bursátil de AT&T.

Esta división generó el año pasado US$ 25.000 millones en ventas, 39% de los ingresos de AT&T, y ganancias netas de US$ 9.200 millones, 46% de los beneficios totales de la compañía.

AT&T Business será también la matriz de la nueva AT&T Consumer, que tendrá a su cargo el negocio de larga distancia para clientes particulares, uno de los sectores que tiene más competencia y cuyos ingresos se han visto seriamente mermados en los últimos años.

Las acciones de AT&T Consumer serán llamadas acciones de seguimiento, es decir, que no implicarán la posesión física de activos, sino sólo participación en los beneficios del negocio.

AT&T Wireless y AT&T Broadband tendrán acciones y activos propios.

La operación, “creará una familia de cuatro proveedores de servicios a nivel nacional que estarán aún mejor equipados que hoy para entregar a las familias y empresas estadounidenses una nueva generación de servicios globales en comunicaciones y datos”, afirmó Michael Armstrong, presidente y director ejecutivo de AT&T.

Se espera que las empresas independientes tengan mayor flexibilidad para conseguir capital, innovar productos y servicios y establecer alianzas o comprar otras empresas.

Desde el lunes circulaban en Wall Street rumores sobre la posible división de AT&T, una operación que es vista positivamente por los analistas puesto que permite que los inversores concentren sus carteras en aquellos negocios más rentables.

Las acciones de AT&T venían sufriendo desde hace muchos meses los malos resultados de la división de telefonía de larga distancia, lo que impedía que se notaran los beneficios de los negocios de altos ingresos y rápido crecimiento, como los sectores de transmisión de datos y de banda ancha.

AT&T posee actualmente una acción de seguimiento de la división de telefonía inalámbrica, negocio del que aún es propietaria de 85%.

Los planes de la empresa son vender las acciones que aún tiene en su poder y más tarde dotar de independencia a la filial.

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