BP falló en Rosneft por no entender a Rusia
En la actualidad, las grandes petroleras privadas deben tener instintos geopolíticos certeros en materia de exploración submarina. Su déficit, por ejemplo, ha puesto en riesgo los negocios del gigante British Petroleum, nada menos.
11 abril, 2011
<p>Las ambiciones de la empresa en Rusia sufrieron otro revés, cuando un tribunal arbitral sueco sostuvo un dictamen de marzo que bloquea indefinidamente un canje de acciones con la estatal Rosneft. No obstante, Robert Dudley –director ejecutivo de BP-, aun podría salvar una operación de US$ 7.800 millones.<br />
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Pero aquel veredicto señala hasta qué punto el norteamericano malinterpretó el juego político moscovita al negociar el acuerdo de marras. Algunos expertos en la materia, empero, estiman que Dudley fue superado por factores que ni siquiera un ducho “kremlinólogo” hubiese podido vislumbrar.<br />
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Sea como fuere, la decisión judicial obliga a que BP apacigüe a sus socios presentando no ese paquete, sino un emprendimiento conjunto. Así plantea un grupo de multimillonarios opuesto al pacto con Rosneft: exactamente, el que obtuvo el dictamen arbitral en Estocolmo. Su demanda argüía que la compañía estatal había transgredido su propio convenio con los accionistas de BP, base de una empresa mixta, TNK-BP. <br />
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En una declaración emitida el sábado, la firma británica sostiene que el fallo es simplemente un diferimiento y que proseguiría el arbitraje en pos de otro veredicto más favorable. No obstante, BP “explorará ahora posibilidades de una salida aceptable para las partes.<br />
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Los oligarcas partícipes de TNK-BP actúan como grupo con el nombre AAR y califican el arbitraje como “justo, prudente y bien estructurado. Nos complacerá seguir cooperando con el tribunal y entregando toda información adicional requerida durante ulteriores audiencias”, indica Staníslav Polóvyets, director ejecutivo de AAR.<br />
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Uno que quedó colgado es el primer ministro Vladimir Putin, que a mediados de enero presidió la firma del acuerdo con Rosnyeft. Este documento determinaba que ambas compañías hicieran inversiones mutuas en forma de canje accionario. Ello representaría alrededor de 5% de BP, 9,8% de su asociada y la exploración conjunta de yacimientos bajo el océano Ártico.<br />
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Tampoco queda bien parado Dudley. La suspensión del acuerdo ruso le costará más efectivo, tempo y apoyo de los accionistas que lo previsto. En el plenario previsto para el jueves en Londres habrá preguntas incómodas, sin la menor duda. La peor: ¿cómo pueden los ejecutivos haber caído de bruces tras gestionar TNK-BP de 2003 a 2010?</p>
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