Bajará inversión automotriz en Brasil

Las fábricas tienen 40% de su capacidad de producción ociosa, así que no prevén nuevas inversiones.

12 mayo, 2000

Los fabricantes de vehículos establecidos en Brasil pretenden reducir sus inversiones en el país ante el escaso crecimiento de los mercados nacional y del Mercosur, señala un informe publicado hoy por el diario económico “Valor”.

En el informe, los directivos de varias empresas reconocen que sus fábricas están con cerca del 40% de su capacidad ociosa, lo que ha obligado a algunas a reducir los turnos de trabajo y causado un impacto negativo en el empleo del sector.

“Fue una decepción para todos los fabricantes”, dijo el presidente de la Daimler Chrysler en América del Sur, Ben van Schaik, al ser interrogado sobre el bajo aumento de la demanda de automóviles.

La industria brasileña tiene capacidad para producir tres millones de vehículos por año, pero la previsión de los directivos de la industria automovilística, con base en la demanda del mercado, es que el ritmo pleno de producción sólo se alcanzará dentro de tres o cinco años.

Según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores (Anfavea), las plantas de sus empresas asociadas produjeron en 1998 para los mercados local y externo 1.585.600 unidades, lo que equivale a 53% de la capacidad total de sus fábricas.

“Sudamérica tiene hoy un mercado de dos millones de vehículos, lo que hace imposible la supervivencia de trece fabricantes”, apuntó el superintendente de Fiat Automóviles, Gianni Coda, quien considera que no hay razón para hacer nuevas inversiones.

La previsión de los ejecutivos es que la situación experimente una leve mejoría en el 2001, cuando las fábricas utilizarán 59% de su capacidad, lo que, según el presidente de Volkswagen en Brasil, Herbert Demel, “está lejos de ser saludable”.

“Estamos intentando sobrevivir. Tenemos la certeza de que el mercado va a crecer, pero la velocidad y el tamaño de esta recuperación dependerá del ritmo de distribución de la renta en el país”, declaró al diario el jefe de la división para América de Toyota, Hiroyuki Okabe.

A pesar de la crisis, las empresas han inaugurado nuevas fábricas en Brasil, pero los directivos advierten que se trata de proyectos que ya estaban en marcha cuando se estancó el mercado y que han seguido adelante para no perder las inversión hecha.

Según el informe, las montadoras creyeron que el Mercosur despegaría antes del fin de la década del noventa y, por esa razón, exageraron las expectativas frente al potencial del mercado brasileño.

“No hay razón para invertir en aumento de capacidad”, expresó el vicepresidente de General Motors y presidente de la Anfavea, José Carlos Pinheiro Neto, quien indicó que, de cualquier forma, la multinacional estadounidense inaugurará el 18 de julio una nueva fábrica en la que se invirtieron US$ 600 millones.

Fuente: EFE

Los fabricantes de vehículos establecidos en Brasil pretenden reducir sus inversiones en el país ante el escaso crecimiento de los mercados nacional y del Mercosur, señala un informe publicado hoy por el diario económico “Valor”.

En el informe, los directivos de varias empresas reconocen que sus fábricas están con cerca del 40% de su capacidad ociosa, lo que ha obligado a algunas a reducir los turnos de trabajo y causado un impacto negativo en el empleo del sector.

“Fue una decepción para todos los fabricantes”, dijo el presidente de la Daimler Chrysler en América del Sur, Ben van Schaik, al ser interrogado sobre el bajo aumento de la demanda de automóviles.

La industria brasileña tiene capacidad para producir tres millones de vehículos por año, pero la previsión de los directivos de la industria automovilística, con base en la demanda del mercado, es que el ritmo pleno de producción sólo se alcanzará dentro de tres o cinco años.

Según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores (Anfavea), las plantas de sus empresas asociadas produjeron en 1998 para los mercados local y externo 1.585.600 unidades, lo que equivale a 53% de la capacidad total de sus fábricas.

“Sudamérica tiene hoy un mercado de dos millones de vehículos, lo que hace imposible la supervivencia de trece fabricantes”, apuntó el superintendente de Fiat Automóviles, Gianni Coda, quien considera que no hay razón para hacer nuevas inversiones.

La previsión de los ejecutivos es que la situación experimente una leve mejoría en el 2001, cuando las fábricas utilizarán 59% de su capacidad, lo que, según el presidente de Volkswagen en Brasil, Herbert Demel, “está lejos de ser saludable”.

“Estamos intentando sobrevivir. Tenemos la certeza de que el mercado va a crecer, pero la velocidad y el tamaño de esta recuperación dependerá del ritmo de distribución de la renta en el país”, declaró al diario el jefe de la división para América de Toyota, Hiroyuki Okabe.

A pesar de la crisis, las empresas han inaugurado nuevas fábricas en Brasil, pero los directivos advierten que se trata de proyectos que ya estaban en marcha cuando se estancó el mercado y que han seguido adelante para no perder las inversión hecha.

Según el informe, las montadoras creyeron que el Mercosur despegaría antes del fin de la década del noventa y, por esa razón, exageraron las expectativas frente al potencial del mercado brasileño.

“No hay razón para invertir en aumento de capacidad”, expresó el vicepresidente de General Motors y presidente de la Anfavea, José Carlos Pinheiro Neto, quien indicó que, de cualquier forma, la multinacional estadounidense inaugurará el 18 de julio una nueva fábrica en la que se invirtieron US$ 600 millones.

Fuente: EFE

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades