Washington reclama una definición regional por la crisis colombiana

En el marco de una ofensiva diplomática de la Casa Blanca, el zar antidrogas visitará la Argentina, Brasil, Bolivia y Perú. Menem ofreció su colaboración al presidente colombiano, en caso de ser necesaria.

11 agosto, 1999

El gobierno de los Estados Unidos lanzó ayer una ofensiva diplomática con el objetivo de regionalizar el conflicto que mantiene Washington con la narcoguerrilla colombiana. La administración de Bill Clinton considera que en América latina no se le presta demasiado apoyo al presidente de Colombia, Andrés Pastrana, en su lucha contra las fuerzas revolucionarias y el narcotráfico. “Todos necesitamos hacer más, porque éste es un problema regional”, sintetizó ayer James Rubin, vocero de la secretaria de Estado, Madeleine Albright, quien a su vez cree que “la guerrilla colombiana está causando inestabilidad en la región”, según Rubin. De esta forma, y para cumplir su objetivo, Washington inició una serie de sondeos entre los principales países del hemisferio, incluyendo a la Argentina, para analizar la crisis y el papel que tomaría cada país en caso de que Clinton decidiera impulsar una intervención en Colombia. El zar antidrogas, el general Barry McCaffrey, dijo que Clinton le encomendó que extienda a Perú, Brasil y la Argentina las consultas que ya adelantó en Ecuador y Venezuela. El presidente Carlos Menem, por su parte, se comunicó ayer con Pastrana y expresó su solidaridad con el gobierno colombiano. Luego ofreció toda la colaboración necesaria.
(Clarín, La Nación)

El gobierno de los Estados Unidos lanzó ayer una ofensiva diplomática con el objetivo de regionalizar el conflicto que mantiene Washington con la narcoguerrilla colombiana. La administración de Bill Clinton considera que en América latina no se le presta demasiado apoyo al presidente de Colombia, Andrés Pastrana, en su lucha contra las fuerzas revolucionarias y el narcotráfico. “Todos necesitamos hacer más, porque éste es un problema regional”, sintetizó ayer James Rubin, vocero de la secretaria de Estado, Madeleine Albright, quien a su vez cree que “la guerrilla colombiana está causando inestabilidad en la región”, según Rubin. De esta forma, y para cumplir su objetivo, Washington inició una serie de sondeos entre los principales países del hemisferio, incluyendo a la Argentina, para analizar la crisis y el papel que tomaría cada país en caso de que Clinton decidiera impulsar una intervención en Colombia. El zar antidrogas, el general Barry McCaffrey, dijo que Clinton le encomendó que extienda a Perú, Brasil y la Argentina las consultas que ya adelantó en Ecuador y Venezuela. El presidente Carlos Menem, por su parte, se comunicó ayer con Pastrana y expresó su solidaridad con el gobierno colombiano. Luego ofreció toda la colaboración necesaria.
(Clarín, La Nación)

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