(NA). – El interventor de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), Douglas Lyall, vaticinó que el último cuatrimestre del año, que se inicia el fin de semana próximo, “va a ser muy duro” para el organismo.
El funcionario justificó su pronóstico al señalar que hasta diciembre, “abonaremos los $ 770 millones en concepto de sentencias judiciales que fueron presupuestados para este año.
Además, prevemos una suba aún no cuantificada de prestaciones por desempleo”.
En cuanto a las metas con el FMI, Llyal puntualizó que el total de baja del déficit de la Nación es de $ 900 millones, de los cuales 440 millones corresponden a la Anses, y aseveró que el grueso de ese ahorro “se va a lograr con la erradicación del fraude”.
A través de un reportaje publicado en un matutino porteño, el funcionario reiteró que en la Anses “no habrá despidos. Se va a redistribuir personal para reforzar la línea operativa”.
“Ya tuvimos 150 despidos de contratados que cobraban salarios de entre $ 2.000 y 5.000 mensuales. Además, los 48 gerentes actuales firmaron un compromiso sobre resultados de gestión, y los que no cumplan deberán irse a fin de año”, añadió.
Según Llyal, el plantel burocrático de la Anses “puede parecer excesivo, ya que hay 3.000 agentes en la administración central y otros 5.000 para la atención al público”.
(NA). – El interventor de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), Douglas Lyall, vaticinó que el último cuatrimestre del año, que se inicia el fin de semana próximo, “va a ser muy duro” para el organismo.
El funcionario justificó su pronóstico al señalar que hasta diciembre, “abonaremos los $ 770 millones en concepto de sentencias judiciales que fueron presupuestados para este año.
Además, prevemos una suba aún no cuantificada de prestaciones por desempleo”.
En cuanto a las metas con el FMI, Llyal puntualizó que el total de baja del déficit de la Nación es de $ 900 millones, de los cuales 440 millones corresponden a la Anses, y aseveró que el grueso de ese ahorro “se va a lograr con la erradicación del fraude”.
A través de un reportaje publicado en un matutino porteño, el funcionario reiteró que en la Anses “no habrá despidos. Se va a redistribuir personal para reforzar la línea operativa”.
“Ya tuvimos 150 despidos de contratados que cobraban salarios de entre $ 2.000 y 5.000 mensuales. Además, los 48 gerentes actuales firmaron un compromiso sobre resultados de gestión, y los que no cumplan deberán irse a fin de año”, añadió.
Según Llyal, el plantel burocrático de la Anses “puede parecer excesivo, ya que hay 3.000 agentes en la administración central y otros 5.000 para la atención al público”.