Unión Europea: curioso proyecto para hacer fraude electoral

Lo denuncia el londinense “Sunday Telegraph”. Dando por hecho el triunfo del NO a la constitución europea en Francia, la presidencia de turno en Bruselas tiene un “plan B” para ignorar los resultados.

24 mayo, 2005

A cargo de Luxemburgo, esa instancia tiene una idea para neutralizar el voto negativo, pero sólo funcionaría si la diferencia con el SI superase los cinco puntos. Según los últimos sondeos, la cosa está 53 contra 46%.

En la hipótesis con cinco puntos o menos, el ejecutivo de la Unión Europea, con el apoyo unánime de los veinticinco miembros (otra condición quizá no tan fácil), sacaría una declaración conjunta “de emergencia”, pasando por alto el plebiscito del domingo 29.

Básicamente, el “golpe desde la cúpula” establecerá que, con tan escaso margen, será factible seguir adelante con los plebiscitos pendientes (Holanda realiza el suyo el 11 de junio). Junto con la declaración, se lanzaría un plan de emergencia que obligaría a repetir el referendo francés.

Amén de ilegal y contrario a las reglas fundacionales de la UE, este dislate puede naufragar en pocos días. Ocurre que las encuestas holandesas también son negativas para la constitución europea. Además, la “chirinada luxemburguesa” podrían porvocar un vuelco al NO en Holanda y Francia misma, cuyo plesbiscito sería dejado para el fin de la ronda.

A cargo de Luxemburgo, esa instancia tiene una idea para neutralizar el voto negativo, pero sólo funcionaría si la diferencia con el SI superase los cinco puntos. Según los últimos sondeos, la cosa está 53 contra 46%.

En la hipótesis con cinco puntos o menos, el ejecutivo de la Unión Europea, con el apoyo unánime de los veinticinco miembros (otra condición quizá no tan fácil), sacaría una declaración conjunta “de emergencia”, pasando por alto el plebiscito del domingo 29.

Básicamente, el “golpe desde la cúpula” establecerá que, con tan escaso margen, será factible seguir adelante con los plebiscitos pendientes (Holanda realiza el suyo el 11 de junio). Junto con la declaración, se lanzaría un plan de emergencia que obligaría a repetir el referendo francés.

Amén de ilegal y contrario a las reglas fundacionales de la UE, este dislate puede naufragar en pocos días. Ocurre que las encuestas holandesas también son negativas para la constitución europea. Además, la “chirinada luxemburguesa” podrían porvocar un vuelco al NO en Holanda y Francia misma, cuyo plesbiscito sería dejado para el fin de la ronda.

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