Esa noche lo primero que hizo fue poner en Google esta frase: “los medios tradicionales …”. Google automáticamente completó la frase con “están muertos, muriendo, noticias falsas, terminados”.
Cliqueó en el primer link sugerido que correspondía a un sitio llamado CNSnews que, efectivamente afirmaba que los medios tradicionales están muertos. ¿Cómo había podido un sitio tan desconocido como ése haber llegado a figurar en el primer puesto de la búsqueda? Evidentemente, con un algoritmo muy inteligente.
Cadwalladr cliquea entonces en “About us” y se entera que es propiedad de Media Research Center, una organización que se erige en el vigilante de los medios estadounidenses que se compromete férreamente a neutralizar toda tendencia izquierdista de las noticias, de los medios y de la cultura popular”.
Sigue la búsqueda. ¿Quién lo financia? Robert Mercer, el hombre que financió la campaña de Trump aportando 13 millones y medio de dólares.
¿Cómo se hizo millonario? Con una brillante carrera en ciencias de la computación. En IBM realizó descubrimientos revolucionarios en procesamiento de lenguaje, una ciencia que luego fue clave para el desarrollo de la actual Inteligencia Artificial. También es CEO de un fondo de cobertura que usa algoritmos para participar en los mercados financieros.
Mercer es, entonces, experto en algoritmos, ultraderechista y multimillonario dispuesto a usar su dinero para intentar modelar el mundo de acuerdo con sus ideales.
Financia un Think Tank que niega el cambio climático y se ha propuesto destruir la credibilidad de los medios tradicionales. Para esto último cuenta con la ayuda de su socio Steve Bannon, administrador de la campaña de Trump y ahora su principal estratega. El dinero que da al Media Research Center con la misión de “corregir la tendencia liberal” es apenas una de sus estrategias . Hay otras, todavía más deliberadas. De todas ellas, la estrella más brillante de su galaxia es Breitbart.
Los US$ 10 millones de Mercer permitieron a Bannon fundar Breitbart, un sitio derechista de noticias , creado con la expresa intención de ser el Huffington Post de la derecha. Se proponían recuperar la cultura. Eso, que posiblemente ya hayan logrado, es apenas el principio.
Bannon abrió Breitbart Londres justo antes de las elecciones británicas, algunos dicen que para hacer una guerra cultural y política. Luego vienen Francia y Alemania.
Robert Mercer también tiene una participación de US$ millones en Cambridge Analytica, una pequeña compañía de análisis de datos desprendida del SCL Group británico. ¿Su especialización? Estrategias de manipulación de elecciones (bueno, la palabra que ellos usan es “management“) y “operación de información y mensajes” refinada con más de 25 años en Afganistán y Pakistán. En círculos militares esto es conocido como “operaciones psicológicas”, o sea propaganda masiva que trabaja actuando sobre las emociones de la gente.
Cambridge Analytica trabajó para la campaña de Trump y también, según algunas fuentes, para la campaña por el “Leave” en Gran Bretaña. ¿Habrá sido cierto entonces la versiòn de grupos de hackers trabajando en Albania para fabricar las famosas fake news?
Steve Bannon dijo al Wall Street Journal“: “La política es guerra” . Y cada vez más así lo parece.