Sturzenegger: cumplir con el FMI es una cuestión de segundo orden
El asesor cavallista explicó que se necesitan 5 meses para crecer. Consideró que las cinco medidas básicas para la reactivación están listas y que el cumplimiento de las metas es una cuestión de segundo orden".
El economista Adolfo Sturzenegger, uno de los principales asesores del ministro de Economía argentino, Domingo Cavallo, sostuvo que la confianza del mercado en la Argentina surgirá de la transformación del círculo vicioso actual “en un círculo virtuoso si aparece una dinámica tranquilizadora”.
El alter ego y asesor de Cavallo explicó en dialogo con el diario La Nación que “esta dinámica debe acoplarse a cinco acciones que se están tomando: baja de impuestos a la inversión, planes sectoriales, desregulación horizontal, plan de infraestructura y algún replanteo en el frente comercial externo”.
El economista sostuvo que se necesitan cinco meses para crecer, y afirmó que en este contexto, el cumplimiento de las metas cuantitativas con el FMI es un asunto de “segundo orden”.
Consultado acerca del canje de títulos de la deuda pública que llevó a Domingo Cavallo a planear la gira iniciada ayer, domingo, Sturzenegger explicó que la operación “debe incorporar algún nivel de tenedores no residentes, con una tasa no preocupante en términos de solvencia, que incorpore a las Letes y con un monto aceptable” para ser considerado exitoso.
Para el economista una tasa muy baja no reflejaría un canje compulsivo porque “se trata de un juego de intereses, como toda actividad financiera. Comprar un activo a bajo precio no significa hacerlo en forma compulsiva”.
Sturzenegger consideró también que “luego de tres años de recesión, lo menos que se puede pedir (a la gestión de Domingo Cavallo) son cinco meses hasta que haya una reactivación. Además, los primeros dos meses de gestión fueron de bastante incertidumbre, por las nuevas ideas que se plantearon para recrear alguna confianza”.
Según estas explicaciones el plan de Cavallo supone que la clave estará en “el quiebre de la salida de capitales” y en la promoción de nuevas “herramientas para financiar al sector privada”.
El economista ratificó también su confianza en que el FMI es conciente de estos plazos y por ese motivo no habrá “problemas institucionales” con ellos; y añadió que “después, si se cumplen las metas cuantitativas en forma total o parcial, es una cuestión de segundo orden”.
El economista Adolfo Sturzenegger, uno de los principales asesores del ministro de Economía argentino, Domingo Cavallo, sostuvo que la confianza del mercado en la Argentina surgirá de la transformación del círculo vicioso actual “en un círculo virtuoso si aparece una dinámica tranquilizadora”.
El alter ego y asesor de Cavallo explicó en dialogo con el diario La Nación que “esta dinámica debe acoplarse a cinco acciones que se están tomando: baja de impuestos a la inversión, planes sectoriales, desregulación horizontal, plan de infraestructura y algún replanteo en el frente comercial externo”.
El economista sostuvo que se necesitan cinco meses para crecer, y afirmó que en este contexto, el cumplimiento de las metas cuantitativas con el FMI es un asunto de “segundo orden”.
Consultado acerca del canje de títulos de la deuda pública que llevó a Domingo Cavallo a planear la gira iniciada ayer, domingo, Sturzenegger explicó que la operación “debe incorporar algún nivel de tenedores no residentes, con una tasa no preocupante en términos de solvencia, que incorpore a las Letes y con un monto aceptable” para ser considerado exitoso.
Para el economista una tasa muy baja no reflejaría un canje compulsivo porque “se trata de un juego de intereses, como toda actividad financiera. Comprar un activo a bajo precio no significa hacerlo en forma compulsiva”.
Sturzenegger consideró también que “luego de tres años de recesión, lo menos que se puede pedir (a la gestión de Domingo Cavallo) son cinco meses hasta que haya una reactivación. Además, los primeros dos meses de gestión fueron de bastante incertidumbre, por las nuevas ideas que se plantearon para recrear alguna confianza”.
Según estas explicaciones el plan de Cavallo supone que la clave estará en “el quiebre de la salida de capitales” y en la promoción de nuevas “herramientas para financiar al sector privada”.
El economista ratificó también su confianza en que el FMI es conciente de estos plazos y por ese motivo no habrá “problemas institucionales” con ellos; y añadió que “después, si se cumplen las metas cuantitativas en forma total o parcial, es una cuestión de segundo orden”.
