<p>Apelando a un lenguaje que sus ortodoxos –y mediocres- antecesores jamás habrían usado, el socialdemócrata francés sostiene que, “dada la fragilidad de la reacción en occidente, desechar los estímulos estatales podría frustrar el proceso”. Hablando en Berlín, insistía: “salir de esos esquemas antes de tiempo, con pretextos monetaristas, sería contraproducente”.</p>
<p>Citando a Francia, Alemania y China, el econonista admite que “emergemos del pozo pero, salvo en el último caso, no al ritmo necesario. Por eso debemos promover medidas como la reforma financiera o terminar con remuneraciones abusiva en el sector privado, como recomienda el informe del Ecofin al grupo de los 20”. Este viernes, Gran Bretaña salió por su cuenta a defender esas bonificaciones.</p>
<p>Los comentarios de Strauss-Kahn reflejan una cautela compartida con Timothy Geithner –secretario norteamericano de hacienda- o Christine Lagarde, su colega francesa. Los tres y otros altos funcionarios estaban retocando el documento que ocho titulares europeos de economía o hacienda (Ecofin) destinan a la cumbre del g-20 (24 y 25 de este mes).</p>
<p>El jefe del FMI criticó la “cultura del riesgo especulativo” que venía caracterizando al negocio financiero privado desde iniciado el auge de los instrumentos derivativos, a mediados de los años 90. Al igual que otros economistas sistémicos, considera ese factor como clave de la crisis que azota a occidente desde 2006. Lamentablemente, su propia burocracia técnica sigue aferrada a la ortodoxia neoclásica.</p>
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Strauss-Kahn: no saquen los estímulos antes de tiempo
El director gerente del Fondo Monetario Internacional, Dominique Strauss-Kahn, cree que existe un peligro real: abandonar prematuramente los programas de recuperación. Las tendencias recesivas aún no aflojan lo bastante.