Sigue la violencia en Medio Oriente
La retirada israelí de Gaza no hace decrecer la violencia en la región. Hoy se registraron nuevos enfrentamientos, durante una jornada en la que los judíos conmemoraron el Holocausto.
(EFE).- La precipitada retirada israelí de las zonas que ocupó el martes por la noche en la franja de Gaza, bajo presión de Estados Unidos, no hizo decrecer la violencia en la región y las posibilidades de que el conflicto pueda resolverse a corto plazo son lejanas.
Palestinos e israelíes continuaron hoy (miércoles 18) los enfrentamientos con la misma intensidad que en los días que precedieron a la invasión, en la madrugada del lunes, en represalia por un ataque contra la localidad israelí de Sderot.
Israel se retiró de los territorios que había ocupado en Gaza por presiones de Estados Unidos y después de que el secretario de Estado de ese país, Colin Powell, condenara con dureza la operación israelí, que calificó de “agresión desproporcionada”.
El primer ministro de Israel, Ariel Sharón, negó que la retirada se debiera a presiones estadounidenses. En este sentido, aseguró que su país nunca tuvo la intención de permanecer en las zonas palestinas o de invadir otras, y que la orden de retirada ya se había impartido independientemente de las críticas de Estados Unidos.
Por su parte, el ministro israelí de Exteriores, Simón Peres, agregó que el objetivo de la operación había sido garantizar la vida de civiles y soldados israelíes, que a diario son blanco de los morteros palestinos.
Pero la fugaz retirada israelí de Gaza no ha calmado los ánimos en la región, ni ha hecho decrecer la violencia.
Tanques israelíes bombardearon hoy posiciones palestinas en la ciudad cisjordana de Belén y en la vecina aldea de Bet Yala, al sur de Jerusalén.
El Ejército israelí lanzó cohetes y proyectiles de artillería después de que milicianos palestinos disparasen contra los soldados que están desplegados entre la aldea de Bet Yala y el barrio de Guiló.
El bombardeo, que coincidía con el comienzo en Israel de una jornada de luto para recordar a los seis millones de judíos que perecieron en el Holocausto a manos de los nazis, se escuchó en el centro de Jerusalén, a varios kilómetros del lugar de los hechos.
Esta mañana, palestinos dispararon con morteros contra un asentamiento judío en la franja de Gaza y contra la zona industrial de Erez, desde la localidad palestina de Bet Hanún, la misma que atacó el Ejército alegando que desde allí se produjo el bombardeo de Sderot.
Además, milicianos palestinos dispararon contra el kibutz Nir Oz, en territorio israelí.
(EFE).- La precipitada retirada israelí de las zonas que ocupó el martes por la noche en la franja de Gaza, bajo presión de Estados Unidos, no hizo decrecer la violencia en la región y las posibilidades de que el conflicto pueda resolverse a corto plazo son lejanas.
Palestinos e israelíes continuaron hoy (miércoles 18) los enfrentamientos con la misma intensidad que en los días que precedieron a la invasión, en la madrugada del lunes, en represalia por un ataque contra la localidad israelí de Sderot.
Israel se retiró de los territorios que había ocupado en Gaza por presiones de Estados Unidos y después de que el secretario de Estado de ese país, Colin Powell, condenara con dureza la operación israelí, que calificó de “agresión desproporcionada”.
El primer ministro de Israel, Ariel Sharón, negó que la retirada se debiera a presiones estadounidenses. En este sentido, aseguró que su país nunca tuvo la intención de permanecer en las zonas palestinas o de invadir otras, y que la orden de retirada ya se había impartido independientemente de las críticas de Estados Unidos.
Por su parte, el ministro israelí de Exteriores, Simón Peres, agregó que el objetivo de la operación había sido garantizar la vida de civiles y soldados israelíes, que a diario son blanco de los morteros palestinos.
Pero la fugaz retirada israelí de Gaza no ha calmado los ánimos en la región, ni ha hecho decrecer la violencia.
Tanques israelíes bombardearon hoy posiciones palestinas en la ciudad cisjordana de Belén y en la vecina aldea de Bet Yala, al sur de Jerusalén.
El Ejército israelí lanzó cohetes y proyectiles de artillería después de que milicianos palestinos disparasen contra los soldados que están desplegados entre la aldea de Bet Yala y el barrio de Guiló.
El bombardeo, que coincidía con el comienzo en Israel de una jornada de luto para recordar a los seis millones de judíos que perecieron en el Holocausto a manos de los nazis, se escuchó en el centro de Jerusalén, a varios kilómetros del lugar de los hechos.
Esta mañana, palestinos dispararon con morteros contra un asentamiento judío en la franja de Gaza y contra la zona industrial de Erez, desde la localidad palestina de Bet Hanún, la misma que atacó el Ejército alegando que desde allí se produjo el bombardeo de Sderot.
Además, milicianos palestinos dispararon contra el kibutz Nir Oz, en territorio israelí.
