La Fundación Capital estimó hoy
que la inflación trepará al 55 por ciento este año, y al 45 para
el 2003, si se logran mantener las condiciones básicas de
estabilidad cambiaria y teniendo en cuenta el impacto del aumento
en las tarifas de servicios públicos.
La entidad dijo que la variación del índice de precios en los
próximos meses dependerá de la evolución del tipo de cambio, de la
indexación en las tarifas de los servicios públicos y el impacto
de la recesión económica.
La Fundación que encabeza el economista Carlos Pérez sostuvo
que un punto de preocupación es “la inflación reprimida que parece
esconderse en la gran diferencia entre el aumento” de los precios
minoristas y mayoristas.
Indicó que la inflación mayorista creció un 120 por ciento
durante los primeros nueve meses del año, cuando la inflación
minorista apenas se aproxima al 40 por ciento.
“La amenaza potencial de mayor inflación futura consiste
entonces en tratar de responder si en los próximos meses esa
diferencia entre ambos aumentos acumulados de precios que asciende
a un 80 por ciento” se trasladará al sector minorista, precisó
la entidad.
En tal sentido, sostuvo que la reestructuración tarifaria que
actualmente el gobierno se encuentra negociando con las empresas
“privatizadas” reducirá “la brecha entre la inflación mayorista y
minorista”.
La Fundación dijo que durante setiembre los precios al
consumidor “continuaron aumentando pero a un ritmo sensiblemente
menor que durante la primera parte del año”.
En el informe semanal que difunde semanalmente la entidad
consideró que “se sigue observando un comportamiento financiero y
cambiario muy bueno”.
“En la última semana se dan las condiciones para un mayor
entendimiento entre los tres poderes de Estado y día a día tanto
el gobierno nacional como el FMI se van acercando a la firma de un
acuerdo”, consideró.
No obstante, la FC aseguró que la Argentina “está atravesando
la crisis económica más grave de su historia y consecuentemente
continúa enfrentando problemas de distinta índole”.
“En el plano financiero aún existen indefiniciones con los
amparos, con el corralito y el corralón, y todavía no se ha
comenzado con una reestructuración del sistema financiero”,
consideró.
La Argentina –indicó la entidad– entonces “está lejos del
rebote económico puesto que hay urgencias e incosistencias para
resolver, antes de encarar las reformas económicas
estructurales”.
La Fundación Capital estimó hoy
que la inflación trepará al 55 por ciento este año, y al 45 para
el 2003, si se logran mantener las condiciones básicas de
estabilidad cambiaria y teniendo en cuenta el impacto del aumento
en las tarifas de servicios públicos.
La entidad dijo que la variación del índice de precios en los
próximos meses dependerá de la evolución del tipo de cambio, de la
indexación en las tarifas de los servicios públicos y el impacto
de la recesión económica.
La Fundación que encabeza el economista Carlos Pérez sostuvo
que un punto de preocupación es “la inflación reprimida que parece
esconderse en la gran diferencia entre el aumento” de los precios
minoristas y mayoristas.
Indicó que la inflación mayorista creció un 120 por ciento
durante los primeros nueve meses del año, cuando la inflación
minorista apenas se aproxima al 40 por ciento.
“La amenaza potencial de mayor inflación futura consiste
entonces en tratar de responder si en los próximos meses esa
diferencia entre ambos aumentos acumulados de precios que asciende
a un 80 por ciento” se trasladará al sector minorista, precisó
la entidad.
En tal sentido, sostuvo que la reestructuración tarifaria que
actualmente el gobierno se encuentra negociando con las empresas
“privatizadas” reducirá “la brecha entre la inflación mayorista y
minorista”.
La Fundación dijo que durante setiembre los precios al
consumidor “continuaron aumentando pero a un ritmo sensiblemente
menor que durante la primera parte del año”.
En el informe semanal que difunde semanalmente la entidad
consideró que “se sigue observando un comportamiento financiero y
cambiario muy bueno”.
“En la última semana se dan las condiciones para un mayor
entendimiento entre los tres poderes de Estado y día a día tanto
el gobierno nacional como el FMI se van acercando a la firma de un
acuerdo”, consideró.
No obstante, la FC aseguró que la Argentina “está atravesando
la crisis económica más grave de su historia y consecuentemente
continúa enfrentando problemas de distinta índole”.
“En el plano financiero aún existen indefiniciones con los
amparos, con el corralito y el corralón, y todavía no se ha
comenzado con una reestructuración del sistema financiero”,
consideró.
La Argentina –indicó la entidad– entonces “está lejos del
rebote económico puesto que hay urgencias e incosistencias para
resolver, antes de encarar las reformas económicas
estructurales”.