<p>La Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena, participó recientemente en importantes reuniones en Washington y Madrid en donde expuso sobre las principales medidas que han adoptado los países de la región para enfrentarla crisis económica internacional y los desafíos que se presentan en elfuturo cercano.</p>
<p>En la capital de Estados Unidos, la alta funcionaria de las Naciones Unidas fue invitada a la Reunión de Expertos del Diálogo Interamericano, preparatoria para la próxima Cumbre de las Américas 2009, y a la reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA); mientras que en Madrid participó en el Foro Trilateral Europa – América Latina – Estados Unidos, organizado conjuntamente por la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), el Diálogo Interamericano y el Real Instituto Elcano. Además, dictó una conferencia sobre El año de la Crisis Económica en América Latina en el Foro EFE-Casa de América.</p>
<p>En sus intervenciones, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL destacó que la crisis financiera internacional ha golpeado a la región luego de seis años de bonanza económica, período en el cual se registró un crecimiento sostenido en casi todos los países que a su vez permitió una fuerte caída de la deuda pública y un aumento del gasto social. Por eso hoy se encuentra en mejores condiciones para enfrentar las turbulencias.</p>
<p>Sin embargo, en 2008 “se apagaron los motores del crecimiento” y se espera una importante desaceleración económica para 2009. Alicia Bárcena explicó que los efectos de la crisis en la región se están propagando principalmente a través de cinco canales de transmisión:</p>
<p>1. El contagio financiero, que se ha traducido en un mayor costo de financiamiento externo, por lo que habrá escasez de crédito y falta de liquidez.<br />
2. Los precios de los productos básicos, que bajaron debido a la contracción de la demanda, las expectativas de menor crecimiento mundial y a la apreciación del dólar.<br />
3. Las remesas de los trabajadores emigrantes, que sufrirán una caída debido al menor crecimiento de los países desarrollados, desde donde provienen.<br />
4. La disminución de las exportaciones regionales, que afectará tanto a los productos y bienes básicos como a las manufacturas.<br />
5. La disminución de los flujos de inversión extranjera directa.</p>
<p>“Para aminorar el impacto de esta crisis en las poblaciones más vulnerables es importante evitar la sobre-regulación de los mercados financieros, el proteccionismo en el comercio internacional y el no cumplimiento de los compromisos de Asistencia Oficial para el Desarrollo”, recalcó Bárcena.</p>
<p>Señaló que los países de la región están conscientes que, si bien la mayoría tiene fundamentos macroeconómicos más sólidos que en el pasado, no serán inmunes a esta crisis. Varios han adoptado una serie de medidas para contrarrestar sus efectos, las cuales están orientadas principalmente a restaurar el sistema financiero y la confianza en él, así como a incrementar la demanda por productos de exportación. En este sentido, la crisis es una oportunidad para aplicar un conjunto de políticas fiscales contracíclicas orientadas a modificar las metas fiscales, reducir los impuestos al consumo, incentivar la inversión y el consumo privados, desarrollar estrategias de cobertura de ingresos, defender el gasto social, crear programas de empleo y seguros de desempleo, y defender el “espacio fiscal” para la inversión pública; todo ello con el apoyo decidido de los organismos financieros internacionales.</p>
<p>Si bien no todos los países tienen la suficiente capacidad fiscal para implementar medidas expansivas contracíclicas, muchos han aprobado leyes de presupuesto para 2009 y paquetes reactivadores con importantes incrementos del gasto público –como son los casos de Argentina, México, Chile y Colombia-, los que serán financiados sin recurrir en general a endeudamiento externo. Esto muestra una inédita capacidad contracíclica en la región, destacó Bárcena, en donde la contracción de la actividad privada será morigerada por un creciente gasto público.</p>
<p>En sus intervenciones, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL recalcó que hoy estamos inmersos en un nuevo período de ajuste y transición. “Pero no hay que equivocarse. Esta no es una época de cambios, sino un cambio de época”, señaló. Agregó que la coyuntura actual es una oportunidad única para el planteamiento de un nuevo modelo de desarrollo.</p>
<p>“No sólo es el momento de pensar en una nueva arquitectura financiera internacional, sino también de pensar en un nuevo rol para el Estado”, precisó. Este nuevo rol se refiere a la protección de los sectores más vulnerables para asegurar un desarrollo inclusivo, la promoción de un tejido productivo que incorpore más conocimiento y privilegie la innovación, y la regulación de la actividad económica para que la búsqueda de la rentabilidad privada no conspire contra el bienestar general de la sociedad.</p>
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Secretaria Ejecutiva de la Cepal destaca la capacidad de América latina para enfrentar la crisis internacional
Alicia Bárcena expuso sobre los avances que han alcanzado los países de la región y los principales desafíos que deberán enfrentar.
