La operatoria que impide abonar en efectivo deudas mayores a $10.000, se encuentra demorada debido a problemas en su implementación. Una de las principales dificultades se presenta con el cheque cancelatorio. Como el tema se estaba tratando en el Congreso, los estudios técnicos se encontraban pospuestos hasta que se promulgara la norma ; la salida del decreto, apresuró los tiempos pero los detalles técnicos aun no fueron resueltos.
Resta analizar, entre otras cosas, si el cheque cancelatorio será impreso o virtual –lo que bajaría el costo de la operación, reduciría la logística y permitiría mayor control–.
La operatoria que impide abonar en efectivo deudas mayores a $10.000, se encuentra demorada debido a problemas en su implementación. Una de las principales dificultades se presenta con el cheque cancelatorio. Como el tema se estaba tratando en el Congreso, los estudios técnicos se encontraban pospuestos hasta que se promulgara la norma ; la salida del decreto, apresuró los tiempos pero los detalles técnicos aun no fueron resueltos.
Resta analizar, entre otras cosas, si el cheque cancelatorio será impreso o virtual –lo que bajaría el costo de la operación, reduciría la logística y permitiría mayor control–.