Ruidosas protestas contra el Alca
Hubo dos manifestaciones en el centro de Buenos Aires y otra en Jujuy. Contaron con representantes de otros países de América latina. También hubo varias amenazas de bombas.
(EFE).- Miles de trabajadores protestaron hoy (viernes 6) en Buenos Aires contra la futura creación del Area de Libre Comercio de las Américas (Alca) y calificaron la iniciativa como “una nueva forma de explotación” de Estados Unidos.
Las críticas fueron hechas en dos manifestaciones que se celebraron en el centro de la capital federal, y una de ellas, la más numerosa, terminó en la histórica Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada.
Las protestas se desarrollaron en la víspera de la reunión de ministros y encargados de Comercio de las Américas para preparar la cumbre continental que se celebrará en Québec entre el 20 y el 22 de abril.
“Esta famosa Asociación de Libre Comercio es un plan perfectamente diagramado por Estados Unidos para someter más aún a los pueblos de América Latina”, afirmó el líder de la CGT disidente, Hugo Moyano, quien calificó al Alca como una “asociación ilícita”.
El dirigente sostuvo que los argentinos no aceptarán más que sean “convertidos en esclavos”.
“Vamos a pelear hasta las últimas consecuencias hasta derrotar el Alca y a los que se nos pongan adelante”, manifestó.
En otro acto paralelo, que concluyó frente al hotel donde se alojan los delegados de la reunión, el sindicalista Víctor de Gennaro, líder de los sindicatos de los funcionarios públicos, centró sus críticas en la figura del ministro de Economía, Domingo Cavallo.
De Gennaro dijo que el ministro es el “garante” de la “claudicación del Gobierno” y de su “subordinación a los poderes económicos”.
Incluso llamó a los argentinos a protagonizar una “rebelión popular” para “voltear el nefasto plan que encabeza Cavallo”.
Los manifestantes, que emplearon tambores y cohetes para hacerse oír, portaban las habituales pancartas contra Estados Unidos y contra los organismos financieros internacionales.
Figuras que representaban a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y al Tío Sam, símbolo del poder de Estados Unidos, marchaban entre los manifestantes con gestos amenazadores.
“No al Alca, basta ya de que el yanqui mande”, decía la pancarta que llevaba un muñeco con un poncho.
Las manifestaciones contaron con la presencia de centenares de representantes de países vecinos, así como grupos de jubilados que se unieron a la protesta contra el Alca.
En el norte del país, personas desempleadas y militantes de la Corriente Clasista y Combativa cortaron tres rutas de la provincia de Jujuy, fronteriza con Bolivia, para reclamar puestos de trabajo y rechazar la creación del Alca.
“A este Gobierno no lo votó el pueblo, ya que el poder económico tiene el destino de la nación en sus manos y quiere convertirnos en un pueblo bananero”, afirmó el líder de esa agrupación, Carlos El Perro Santillán.
La jornada de protestas coincidió con amenazas de supuestas bombas en edificios públicos, en el hotel donde se alojan las delegaciones extranjeras y en el aeropuerto internacional de Ezeiza, lo que demoró los vuelos principalmente hacia Estados Unidos.
También se encontró un paquete de explosivos en un cajero automático de una sucursal del Citibank en Buenos Aires.
Los artificieros de la policía explicaron que el bulto tenía una “masa de pólvora libre” que fue desactivada.
En la frontera con Uruguay, en el puente que conecta la ciudad uruguaya de Paysandú y la argentina de Colón, la policía impidió el ingreso de unas 600 personas procedentes de Brasil que pretendían desde primeras hora de hoy sumarse a las protestas.
Políticos de izquierda que mediaron para que se les permitiera el acceso dijeron a EFE que los problemas no fueron con las autoridades uruguayas, sino con la parte argentina, que no les permitió iniciar el trámite para ingresar.
Sin embargo, fuentes oficiales argentinas indicaron que los brasileños no contaban con la documentación necesaria para cruzar la frontera.
(EFE).- Miles de trabajadores protestaron hoy (viernes 6) en Buenos Aires contra la futura creación del Area de Libre Comercio de las Américas (Alca) y calificaron la iniciativa como “una nueva forma de explotación” de Estados Unidos.
Las críticas fueron hechas en dos manifestaciones que se celebraron en el centro de la capital federal, y una de ellas, la más numerosa, terminó en la histórica Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada.
Las protestas se desarrollaron en la víspera de la reunión de ministros y encargados de Comercio de las Américas para preparar la cumbre continental que se celebrará en Québec entre el 20 y el 22 de abril.
“Esta famosa Asociación de Libre Comercio es un plan perfectamente diagramado por Estados Unidos para someter más aún a los pueblos de América Latina”, afirmó el líder de la CGT disidente, Hugo Moyano, quien calificó al Alca como una “asociación ilícita”.
El dirigente sostuvo que los argentinos no aceptarán más que sean “convertidos en esclavos”.
“Vamos a pelear hasta las últimas consecuencias hasta derrotar el Alca y a los que se nos pongan adelante”, manifestó.
En otro acto paralelo, que concluyó frente al hotel donde se alojan los delegados de la reunión, el sindicalista Víctor de Gennaro, líder de los sindicatos de los funcionarios públicos, centró sus críticas en la figura del ministro de Economía, Domingo Cavallo.
De Gennaro dijo que el ministro es el “garante” de la “claudicación del Gobierno” y de su “subordinación a los poderes económicos”.
Incluso llamó a los argentinos a protagonizar una “rebelión popular” para “voltear el nefasto plan que encabeza Cavallo”.
Los manifestantes, que emplearon tambores y cohetes para hacerse oír, portaban las habituales pancartas contra Estados Unidos y contra los organismos financieros internacionales.
Figuras que representaban a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y al Tío Sam, símbolo del poder de Estados Unidos, marchaban entre los manifestantes con gestos amenazadores.
“No al Alca, basta ya de que el yanqui mande”, decía la pancarta que llevaba un muñeco con un poncho.
Las manifestaciones contaron con la presencia de centenares de representantes de países vecinos, así como grupos de jubilados que se unieron a la protesta contra el Alca.
En el norte del país, personas desempleadas y militantes de la Corriente Clasista y Combativa cortaron tres rutas de la provincia de Jujuy, fronteriza con Bolivia, para reclamar puestos de trabajo y rechazar la creación del Alca.
“A este Gobierno no lo votó el pueblo, ya que el poder económico tiene el destino de la nación en sus manos y quiere convertirnos en un pueblo bananero”, afirmó el líder de esa agrupación, Carlos El Perro Santillán.
La jornada de protestas coincidió con amenazas de supuestas bombas en edificios públicos, en el hotel donde se alojan las delegaciones extranjeras y en el aeropuerto internacional de Ezeiza, lo que demoró los vuelos principalmente hacia Estados Unidos.
También se encontró un paquete de explosivos en un cajero automático de una sucursal del Citibank en Buenos Aires.
Los artificieros de la policía explicaron que el bulto tenía una “masa de pólvora libre” que fue desactivada.
En la frontera con Uruguay, en el puente que conecta la ciudad uruguaya de Paysandú y la argentina de Colón, la policía impidió el ingreso de unas 600 personas procedentes de Brasil que pretendían desde primeras hora de hoy sumarse a las protestas.
Políticos de izquierda que mediaron para que se les permitiera el acceso dijeron a EFE que los problemas no fueron con las autoridades uruguayas, sino con la parte argentina, que no les permitió iniciar el trámite para ingresar.
Sin embargo, fuentes oficiales argentinas indicaron que los brasileños no contaban con la documentación necesaria para cruzar la frontera.
