Las características socioeconómicas del sur y el pésimo manejo del conflicto rural por parte del gobierno central, permitían esperar estos resultados. Por otra parte, algunas encuestas reservadas indican que el ambiguo gobernador bonaerense –Daniel Scioli- perdería treinta comunas en la provincia, si hubiese comicios. <br />
<br />
El radical Juan Jure simplemente aprovechó dos cosas. Una, el voto castigo, que puede extenderse a muchos municipios de varias provincias (Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Chaco, Buenos Aires, etc.). Otra, la caída de la presidente Cristina Fernández Kirchner en los sondeos de aceptación pública. <br />
<br />
Para colmo, el perdedor representaba una alianza, Unión por Córdoba (delasotismo) y el maltrecho Frente para la Victoria. Cabe tener presente otro factor: la provincia es remisa al peronismo cuando las papas queman. Esto data de la quiebra entre la ortodoxia (las 62) y la izquierda representada por Sitrac-Sitram, cuya expresión rural era la Federación Agraria. <br />
<br />
Días antes de las elecciones, el siempre oportunista Juan Manuel de la Sota intentó salvar la plata con airadas críticas a los Kirchner. No funcionó. Para mayor abundancia, Río IV es patria chica del ex referente justicialista. <br />
<br />
Los casi diecinueve puntos de diferencia no los registraba la “contra” local desde cuando, en 1983, Raúl Alfonsín arrasó con el peronismo en todo el país. Luego, como sucede hoy con kirchnerismo tipo Luis d’Elía, la alianza la Junta Coordinadora-Lorenzo Miguel-Luis Barrionuevo se encargaría de rifar el capital político alfonsinista. <br />
Río IV: pocas veces, un oficialismo sufrió una derrota electoral tan cantada como ésta
El radical no K obtuvo un cómodo triunfo en la capital agrícola de Córdoba: 35.860 votos (49,3%) contra apenas 22.125 (30,3%). Cabe recordar que, junto con Santa Fe, la provincia es una de las grandes que no responde al dúo presidencial.