El intercambio comercial entre Argentina y Brasil registró una de sus peores performances en lo que va del siglo. En el primer semestre de 2025, el país acumuló un déficit de USD 2.947 millones, una reversión abrupta frente al superávit de USD 107 millones obtenido en el mismo período del año anterior. El dato surge de un informe elaborado por Abeceb, en base a cifras oficiales del Ministerio de Economía de Brasil.
Durante la primera mitad del año, las importaciones argentinas desde su principal socio comercial crecieron un 53% interanual, la mayor expansión semestral desde 2010. En contraste, las exportaciones avanzaron apenas 1,7%, evidenciando un fuerte desbalance en el intercambio bilateral.
Sólo en junio, el déficit fue de USD 520 millones, frente a un superávit de USD 49 millones en igual mes de 2024. El flujo total ascendió a USD 2.718 millones, con un aumento del 38% interanual.
Dinámica sectorial: el protagonismo del rubro automotor
El sector automotriz fue el principal responsable de la dinámica bilateral, tanto por el lado de las importaciones como de las exportaciones. Explicó el 119% del incremento de las ventas argentinas y el 77% del aumento de las compras a Brasil. En detalle, las importaciones de vehículos automóviles de pasajeros treparon un 187,2% interanual y totalizaron USD 379,8 millones. También se destacaron los vehículos para transporte de mercancías (USD 127,9 millones, +362,4%) y los de carretera (USD 110,8 millones, +421,7%).
Del lado de las exportaciones, las ventas de vehículos de pasajeros aumentaron 31,4% (USD 175,1 millones) y las de transporte de mercancías, 27% (USD 289,8 millones). Se sumaron envíos de partes y accesorios (+12,7%) por USD 35 millones.
El agro también mostró signos de reactivación: Argentina importó soja por USD 26 millones (un alza del 602,9%), y exportó trigo y centeno sin moler por USD 112,4 millones (+28,9%). También crecieron las ventas de leche y lácteos (USD 32,8 millones) y cebada (USD 29,6 millones, +98,1%).
Proyecciones 2025: más déficit a la vista
Las estimaciones de Abeceb anticipan que 2025 cerrará con un déficit comercial bilateral cercano a los USD 6.500 millones, más que duplicando el saldo negativo de USD 308 millones registrado en todo 2024.
Aunque se prevé que el ritmo de crecimiento de las importaciones se modere en el segundo semestre —producto de una base de comparación más elevada—, la dinámica seguiría siendo expansiva, con tasas anuales superiores al 40%. En cambio, las exportaciones continuarían con una evolución modesta.
El contexto regional acompañaría parcialmente. Se espera que la economía brasileña crezca 2,2% en 2025 (vs. 3% en 2024), mientras que la apreciación del real frente al dólar podría mejorar la competitividad argentina. No obstante, la expansión del PBI argentino prevista para este año (5,4%) y un proceso de apertura comercial más profundo darían mayor impulso a las importaciones, agravando el desbalance externo con Brasil.
