<p>En general, el alza se atribuye a mayor confianza de inversores y especuladores, en cuanto a que la eurocrisis no se saldrá de control ni pulverizará la demanda. De ese modo, el cobre, el aluminio y demás metales críticos o industriales –parámetros de la actividad manufacturera, marcaron en enero incrementos superiores a 10%. Encabeza la lista el estaño, con 29% de incremento.<br />
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Los metales preciosos mostraban igual tendencia, con 11% en el oro y 19% en la plata. Entretanto, granos tan vitales como el maíz (10%) o el trigo (15%) vienen acumulando avances desde mediados de diciembre. <br />
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Estos precios tan firmes representan un cambio brusco respecto del último trimestre de 2011. En ese momento, las materias primas se hundían debido a las dudas sobre la situación europea. En diciembre, a la sazón, el cobre y el trigo llegaron a caer 12%, el oro perdía 14%, los crudos 9% y el estaño 19%.<br />
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Esta reversión de indicadores les produjo altos dividendos a quienes se habían aferrado a sus colocaciones cuando la borrasca arreciaba. Naturalmente, los precios de esa gama son volátiles y, en verdad, algunos metales perdían terreno esta semana. Por otra parte, si bien algunos rubros se han encarecido, el factor que impulsaba cotizaciones continúa siendo abundante y hasta podría continuar deprimiendo la demanda.<br />
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Dos hechos obrarán potencialmente en favor de los precios. Uno es el anuncio de la Reserva Federal, que mantendrá tasas referenciales próximas a cero hasta 2014. Otro es una decisión del Banco Central Europeo: este mes repetirá la inyección de liquidez (€ 489.000 millones) de diciembre.</p>
Productos básicos: rebotan tras recientes bajas
Durante enero. En efecto, los metales preciosos recobraron hasta 8%, acompañados por los productos agropecuarios con poco más de 5%. Esto revirtió los retrocesos operados en parte de noviembre y casi todo diciembre en los mercados a término.