<p>Se perfila una salida en la persistente crisis de la deuda, según anticipaba en Francfort, sede del Banco Central Europeo (BCE), su vicepresidente, Vítor Constancio. El portugués busca evitar contagios en varios países, el suyo en especial. Entretanto, el titular del BC irlandés –Patrick Honohan- mencionó una cifra ya conocida (€ 122.000 millones), provenientes del fondo de emergencia de la Unión Europea (€ 750.000 millones) para sacar de apuros a bancos privados ilíquidos”. Esto se interpreta como un paso para cauterizar la sangría de capitales especulativos vía Dublín y Londres.<br />
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Constancio fue directo: “es preciso que ese gobierno apele a un rescate adicional para impedir un desborde capaz de afectar al euro, ahora en apenas US$ 1,345/355”. El trasfondo del asunto data de 2006/7 y se centra en la necesidad de “recapitalizar bancos castigados por el colapso de una vasta burbuja inmobiliaria”.<br />
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“Los problemas no se limitan a iliquidez de corto plazo, pues también implican falta de capitales a mediano o largo término”. Pero, como el BCE no puede prestar directamente a instituciones privadas, Dublín debe mediar. Inversores, especuladores e intermediarios tomaron las declaraciones de Constancio y Honohan como indicio de otro rescate y seguían comprando bonos soberanos. <br />
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El fondo de emergencia se estableció en mayo, pero no se destina a la UE sino a los dieciséis m<br />
iembros de la Eurozona. Por otro lado, Alemania continúa siendo promotora de una iniciativa para Irlanda que, de paso, encare su endeudamiento antes de que la especulación la empuje por el camino de Grecia y, quizá, Portugal. <br />
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Mientras, deliberaban en Bruselas los ministros de hacienda de la Eurozona para tratar la cuestión, se barajan las mismas versiones sobre el salvamento que crean euforia en la plaza de títulos públicos. Pero Portugal, tercera en costos de financiamiento, aún teme –señala Fernando Teixeira, ministro de hacienda- que “aumente la necesidad nuestra de un rescate”.<br />
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En cuanto a Angela Merkel, había firmado hace siete días 12 una declaración con otros países, que excluye de cualquier reestructuración a los bonos ya en mercado. Así lo determinará un mecanismo permanente a instaurarse en… 2013. Berlín se dio cuenta del grave error cometido al hablar de reestructuración cuando no se ha logrado suficiente estabilidad. Hoy esto perjudica la imagen interna de Merkel, ya deteriorada por manifestaciones callejeras contra la austeridad en Alemania”.<br />
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Por su parte. Brian Cowen y Brian Lenihan, primer ministro y titular de hacienda respectivamente, ven con inquietud un sexto candidato a rescate. Se trata del grupo Allied Irish Banks, segunda entidad del país, expuesta a una masa de acreencias incobrables.</p>
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Por fin, Irlanda resolvió aceptar un rescate exterior
Tras muchas vacilaciones, Dublin admite que precisa auxilio internacional para sacar de apuros a cinco bancos privados. Este fin de semana se iniciará un salvamento con fondos precedentes en la Unión Europea, para entidades agobiadas por activos tóxicos.