La coalición ganadora, que está formada por el Partido Social Demócrata, de Passos Coelho y el CDS-PP de su socio Paulo Portas, logró 36,8% de los votis ( 99 escaños) frente a 32,4& que sacó el Partido Socialista (PS) de Antonio Costa, que consiguió 85 escaños.
Según Passos Coelho la victoria fue “inequívoca” pese a que no logró mayoría absoluta. Cuando asumió como jefe del ejecutivo de mayoría conservadora, en junio de 2011, Passos Coelho dijo que su gobierno estaría marcado por “el rigor y la contención”. Debía estabilizar las finanzas públicas, hacer crecer la economía y el empleo. Portugal había tenido que solicitar un préstamo financiero internacional de 78 mil millones de euros para evitar la bancarrota.
Passos Coelho cumplió y recuperó “la soberanía financiera”. Los cuatro años fueron difíciles, hubo cortes salariales, aumentos de impuestos, supresión de pagas, eliminación de ayudas sociales. Ahora, con este triunfo, los portugueese le han dado un nuevo voto de confianza.