Paraguay: se profundiza la crisis
Los empresarios paraguayos advirtieron que no hay esperanzas para la gente. Afirman que hay un "desgobierno" como resultado de la "falta de voluntad, de coraje y coherencia patriótica de los gobernantes".
La influyente Asociación de Empresarios Cristianos de Paraguay hizo una evaluación crítica de los dos años de gestión del presidente Luis González Macchi, y opinó que “las esperanzas y el gobierno agonizan”.
La ADEC afirmó que actualmente en Paraguay hay un “desgobierno” como resultado de la “falta de voluntad, de coraje y coherencia patriótica de los gobernantes”.
Por su parte, los campesinos, que habían llevado su protesta hasta la ciudad de Asunción en reclamo de mejoras, accedieron a regresar a sus lugares de origen después de llegar a un acuerdo con el propio presidente paraguayo.
“Esperamos llegar a una paz entre gobernantes y gobernados que nos encuentre bajo un solo rumbo: el del desarrollo económico y social de nuestro pueblo”, dijo el presidente al presentar ante la prensa el documento que selló el entendimiento.
González Macchi asumió el 28 de marzo de 1999 tras el asesinato del vicepresidente Luis Argaña y de siete jóvenes manifestantes opositores, y la renuncia del entonces presidente, Raúl Cubas.
Al comienzo el nuevo mandatario encabezó un gobierno de unidad nacional que contó con el apoyo inicial de gran parte de la ciudadanía, pero luego empezaron los cuestionamientos por hechos de corrupción y la falta de atención a los problemas económicos y sociales del país.
La influyente Asociación de Empresarios Cristianos de Paraguay hizo una evaluación crítica de los dos años de gestión del presidente Luis González Macchi, y opinó que “las esperanzas y el gobierno agonizan”.
La ADEC afirmó que actualmente en Paraguay hay un “desgobierno” como resultado de la “falta de voluntad, de coraje y coherencia patriótica de los gobernantes”.
Por su parte, los campesinos, que habían llevado su protesta hasta la ciudad de Asunción en reclamo de mejoras, accedieron a regresar a sus lugares de origen después de llegar a un acuerdo con el propio presidente paraguayo.
“Esperamos llegar a una paz entre gobernantes y gobernados que nos encuentre bajo un solo rumbo: el del desarrollo económico y social de nuestro pueblo”, dijo el presidente al presentar ante la prensa el documento que selló el entendimiento.
González Macchi asumió el 28 de marzo de 1999 tras el asesinato del vicepresidente Luis Argaña y de siete jóvenes manifestantes opositores, y la renuncia del entonces presidente, Raúl Cubas.
Al comienzo el nuevo mandatario encabezó un gobierno de unidad nacional que contó con el apoyo inicial de gran parte de la ciudadanía, pero luego empezaron los cuestionamientos por hechos de corrupción y la falta de atención a los problemas económicos y sociales del país.
