El diario La Nación consultó a varios ejecutivos y operadores de Wall Street su opinión sobre las perspectivas de futuro que podrían abrírsele a la Argentina partir de la ayuda financiera que recibirá en los próximos dos años.
Todos los consultados aseguraron que el blindaje calmará los mercados y generará cierta confianza que también dependerá de la manera en que el Gobierno encare las reformas estructurales que se consideran necesarias para poder abandonar el proceso recesivo.
Carlos Janada, vicepresidente de Morgan Stanley, dijo que el dinero que el país recibirá del FMI “le dará al gobierno un tiempo para respirar”.
Pero la expectativa es que la Argentina “cubra sus necesidades financieras del primer semestre y se mantenga por un tiempo fuera de los mercados”, agregó. Esta recomendación parece contraria a lo que proyecta realizar el equipo económico (ver ” El Gobierno quiere volver a emitir deuda”).
El paquete disipa el temor que habían expresado en el transcurso de los últimos meses en Wall Street sobre la capacidad de la Argentina de cumplir con sus obligaciones financieras de 2001; “Ahora toda la tensión va a estar concentrada en ver si la economía crece”, pronosticó Janada.
“Esto calmará los mercados y le compra oxígeno al gobierno para los próximos seis meses, pero ahora el reto es crecer”, dijo Eva Sánchez, analista para América latina del Chase Manhattan Bank.
Por su parte, Fernando Losada, de ABN Amro, opinó que los primeros signos de crecimiento, si la economía logra salir de la recesión, “no se verán hasta fines del primer trimestre”. “Si en el segundo trimestre no hay señales, las preocupaciones van a volver”, estimó, aunque aclaró que tiene una visión optimista sobre el futuro de la economía argentina.
El diario La Nación consultó a varios ejecutivos y operadores de Wall Street su opinión sobre las perspectivas de futuro que podrían abrírsele a la Argentina partir de la ayuda financiera que recibirá en los próximos dos años.
Todos los consultados aseguraron que el blindaje calmará los mercados y generará cierta confianza que también dependerá de la manera en que el Gobierno encare las reformas estructurales que se consideran necesarias para poder abandonar el proceso recesivo.
Carlos Janada, vicepresidente de Morgan Stanley, dijo que el dinero que el país recibirá del FMI “le dará al gobierno un tiempo para respirar”.
Pero la expectativa es que la Argentina “cubra sus necesidades financieras del primer semestre y se mantenga por un tiempo fuera de los mercados”, agregó. Esta recomendación parece contraria a lo que proyecta realizar el equipo económico (ver ” El Gobierno quiere volver a emitir deuda”).
El paquete disipa el temor que habían expresado en el transcurso de los últimos meses en Wall Street sobre la capacidad de la Argentina de cumplir con sus obligaciones financieras de 2001; “Ahora toda la tensión va a estar concentrada en ver si la economía crece”, pronosticó Janada.
“Esto calmará los mercados y le compra oxígeno al gobierno para los próximos seis meses, pero ahora el reto es crecer”, dijo Eva Sánchez, analista para América latina del Chase Manhattan Bank.
Por su parte, Fernando Losada, de ABN Amro, opinó que los primeros signos de crecimiento, si la economía logra salir de la recesión, “no se verán hasta fines del primer trimestre”. “Si en el segundo trimestre no hay señales, las preocupaciones van a volver”, estimó, aunque aclaró que tiene una visión optimista sobre el futuro de la economía argentina.