<p>Hasta este martes, empero, los coloquios no han tenido éxito y las posiciones permanecen distantes. Se precisa una señal: que el caudillo declare públicamente aceptar un diálogo con sus opositores. No obstante, el coronel tiene en mente –presumen algunos allegados- una fecha para oficializar la apertura: el próximo 1º de septiembre.<br />
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¿Por qué? Porque ese día se cumple el XLII aniversario del derrocamiento, en 1969, del rey senusí Idrís. Ahí comenzaron la “república popular islámica” y la presidencia vitalicia del “coronel verde”.<br />
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Naturalmente, los enemigos más acérrimos sostienen que Ghadafi no puede durar tanto, aunque hace dos meses que los disidentes y la Organización del Tratado Noratlántico vienen repitiendo el mismo mantra.<br />
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Tampoco los encuentros secretos son cosa nueva. Ya se han efectuado en Oslo, El Cairo y Londres. Sólo que, ahora, Mussa Ibrahim –vocero de “Barka y Cirenaica”- admite cierto progreso en las tratativas. Al parecer, el eje de los contactos romanos es Abdel Fattah Yunes al-Abidí, ex ministro de seguridad en Trípoli y hoy con los rebeldes. En las reuniones participan representantes de Italia, Egipto, Noruega y Túnez. <br />
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Negociaciones secretas entre Benghazi y Trípoli
Pese a desmentidas algo se mueve entre Italia, Libia oriental y occidental. Gente del coronel Muhammar Ghadafi y elementos del gobierno transicional se han reunido en Roma. Su fin es encontrar un modus vivendi que acabe con casi cinco meses de guerra civil.