México: histórico triunfo opositor
Tras 71 años de hegemonía del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la elección presidencial fue ganada por el conservador Vicente Fox. Transición casi inédita.
(EFE).- La holgada victoria del conservador Vicente Fox acaba con 71 años de hegemonía del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y abre paso a una transición legal y pacífica en México.
El rápido reconocimiento del triunfo de Fox por parte del presidente mexicano, Ernesto Zedillo, y del candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Francisco Labastida, dieron paso a una transición política pacífica impensable desde hace siete décadas.
Escrutado 90% de las mesas de votación, Fox aventajaba por casi ocho puntos a Labastida.
Los resultados oficiales, que según las autoridades electorales no sufrirán ya mayores cambios, indican que Fox sumaba 43,04% de los votos, mientras Labastida aparecía con 35,47% y el izquierdista Cuauhtémoc Cárdenas, con un lejano 16,52%.
Zedillo y Labastida reconocieron la derrota de su partido tres horas después del cierre oficial de las urnas y admitieron la ventaja de Fox en un gesto esperado por la sociedad mexicana y por la opinión pública internacional para garantizar la alternancia pacífica en el poder.
Zedillo felicitó a Fox por los resultados y anunció que se reunirá con él “a la mayor brevedad” para acordar los mecanismos de colaboración que aplicarán en los próximos meses hasta el traspaso de poder, el 1 de diciembre.
Tras proclamarse presidente electo de la república, Fox agradeció la madurez del PRI al reconocer la derrota y reiteró que su gobierno será “incluyente y plural”, y tendió la mano tanto al PRI como a la izquierda para colaborar en el nuevo proyecto de nación.
El futuro presidente elogió la actitud de Zedillo y pidió a sus seguidores que celebraran la victoria con respeto a la pluralidad y a la diversidad de puntos de vista, “con tolerancia, sin venganzas ni revanchismos”.
Fox aseguró que su gobierno mantendrá los compromisos contraídos por el PRI. “Los ojos del mundo están puestos en México. Hemos pasado el puente de la alternancia en el poder de forma pacífica y legal”, dijo el candidato conservador.
Numerosos analistas políticos habían advertido que el PRI no entregaría el poder pacíficamente y temían “resistencia” para obstaculizar el reconocimiento a una victoria de la oposición.
Los cerca de 900 observadores extranjeros de 58 países que participaron en las elecciones más reñidas de la historia de México atestiguaron los procedimientos democráticos y el comienzo de una nueva etapa en este país.
Para algunos analistas, Zedillo pasará a la historia como el “hombre de la transición democrática”, que desde el comienzo de su gobierno anunció el fin del “dedazo” (designación del sucesor), la “distancia prudente del PRI” y favoreció el desarrollo de la democracia dentro de su partido.
Al asegurar que el Partido Revolucionario Institucional dará un ejemplo de madurez democrática al aceptar el veredicto de las urnas, Labastida afirmó que la derrota obligará al PRI a “una profunda reflexión” para realizar las reformas necesarias para adecuarse a las nuevas condiciones del país.
Ver más información en “México: la bolsa bendijo la elección” y en “Wall Street cerró en alza”, ambas en la sección Hoy en mercados y finanzas.
(EFE).- La holgada victoria del conservador Vicente Fox acaba con 71 años de hegemonía del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y abre paso a una transición legal y pacífica en México.
El rápido reconocimiento del triunfo de Fox por parte del presidente mexicano, Ernesto Zedillo, y del candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Francisco Labastida, dieron paso a una transición política pacífica impensable desde hace siete décadas.
Escrutado 90% de las mesas de votación, Fox aventajaba por casi ocho puntos a Labastida.
Los resultados oficiales, que según las autoridades electorales no sufrirán ya mayores cambios, indican que Fox sumaba 43,04% de los votos, mientras Labastida aparecía con 35,47% y el izquierdista Cuauhtémoc Cárdenas, con un lejano 16,52%.
Zedillo y Labastida reconocieron la derrota de su partido tres horas después del cierre oficial de las urnas y admitieron la ventaja de Fox en un gesto esperado por la sociedad mexicana y por la opinión pública internacional para garantizar la alternancia pacífica en el poder.
Zedillo felicitó a Fox por los resultados y anunció que se reunirá con él “a la mayor brevedad” para acordar los mecanismos de colaboración que aplicarán en los próximos meses hasta el traspaso de poder, el 1 de diciembre.
Tras proclamarse presidente electo de la república, Fox agradeció la madurez del PRI al reconocer la derrota y reiteró que su gobierno será “incluyente y plural”, y tendió la mano tanto al PRI como a la izquierda para colaborar en el nuevo proyecto de nación.
El futuro presidente elogió la actitud de Zedillo y pidió a sus seguidores que celebraran la victoria con respeto a la pluralidad y a la diversidad de puntos de vista, “con tolerancia, sin venganzas ni revanchismos”.
Fox aseguró que su gobierno mantendrá los compromisos contraídos por el PRI. “Los ojos del mundo están puestos en México. Hemos pasado el puente de la alternancia en el poder de forma pacífica y legal”, dijo el candidato conservador.
Numerosos analistas políticos habían advertido que el PRI no entregaría el poder pacíficamente y temían “resistencia” para obstaculizar el reconocimiento a una victoria de la oposición.
Los cerca de 900 observadores extranjeros de 58 países que participaron en las elecciones más reñidas de la historia de México atestiguaron los procedimientos democráticos y el comienzo de una nueva etapa en este país.
Para algunos analistas, Zedillo pasará a la historia como el “hombre de la transición democrática”, que desde el comienzo de su gobierno anunció el fin del “dedazo” (designación del sucesor), la “distancia prudente del PRI” y favoreció el desarrollo de la democracia dentro de su partido.
Al asegurar que el Partido Revolucionario Institucional dará un ejemplo de madurez democrática al aceptar el veredicto de las urnas, Labastida afirmó que la derrota obligará al PRI a “una profunda reflexión” para realizar las reformas necesarias para adecuarse a las nuevas condiciones del país.
Ver más información en “México: la bolsa bendijo la elección” y en “Wall Street cerró en alza”, ambas en la sección Hoy en mercados y finanzas.
