Las monumentales compras de maíz que está haciendo China aumentaron los precios desde finales del año pasado y ahora la pregunta es cuánto tiempo se podrá sostener esa suba.
La enorme demanda que proviene de la segunda economía del mundo ha generado un alza feroz en los precios de todos los granos. China siempre dependió de mercados extranjeros para la soja que utiliza para alimentar a sus animales. Pero el crecimiento de sus importaciones de maíz tiene a los analistas sorprendidos porque los chinos aspiraban a ser autosuficientes en ese renglón.
El año pasado compró 11,3 millones de toneladas de maíz, de los cuales más de un tercio provino de Estados Unidos. A finales de enero – según informa el Departamento de Agricultura de EE.UU. — compró otros 2,1 millones de toneladas, la compra más grande en la historia del país y la segunda en el mundo. Como respuesta a semejante demanda los precios del maíz superaron los US$ 5 la fanega (una fanega de maíz equivale a 25,40kg).
Entonces, ahora que China se perfila como el más grande comprador de maíz de este año, además de ser el mayor importador de soja del mundo, la pregunta para el sector es si el país se mantendrá a la cabeza de otros grandes compradores, como Japón y SurCorea.
China está comprando mucho maíz porque tiene que recomponer su ganado porcino después de la devastadora ola de fiebre porcina africana de hace unos años. Además, su propia industria maicera redujo plantación desde que Beijing interrumpió su programa de acopio y de compras a precios mínimos. Ambas cosas se habían instaurado para fomentar la autosuficiencia pero provocaron un aumento desmedido de los inventarios.