Lavagna afirmó que no hay que prometerle demasiado al FMI
El ministro de Economía consideró que tanto la Argentina como el FMI han aplicado, históricamente, "políticas erróneas", y por eso afirmó que, para cumplir con los acuerdos, no hay que "prometer en exceso".
“Esperamos que el FMI entienda que la situación actual, con la
grave acumulación de deuda interna y externa, no es el resultado
de un hecho inesperado y súbito”, señaló Lavagna.
Asimismo, el funcionario recordó que “diversos gobiernos argentinos firmaron un total de 19 acuerdos con el FMI desde 1958 en adelante, de los cuales 15 -un número asombroso- fueron incumplidos. El último acuerdo, firmado a fines de 2001, duró apenas unas pocas semanas”.
“Esta pésima perfomance es el resultado de dos políticas
erróneas. Del lado de Argentina, lo que puede definirse como el
´sí fácil´, algo así como ´firmemos cualquier cosa y luego
veremos´. Los resultados de esa actitud están a la vista”,
puntualizó.
El titular del Palacio de Hacienda indicó que “del lado del FMI, los fracasos son el resultado de plantear metas tanto cuantitativas como estructurales irrealistas por sus implicaciones políticas y
sociales, y erradas desde el punto de vista económico. Esto es una
política de apretar para cubrirse”.
“Basta de ´luego veremos´, basta de ´chantadas´. Cumplir es de
por sí bastante difícil como para, además, prometer en exceso”,
enfatizó Lavagna.
El ministro sostuvo además que “este gobierno no quiere asumir
compromisos incumplibles (como ajustes excesivos de tarifas),
compromisos que en su momento consideramos errados (canje
compulsivo de depósitos por bonos) o exigencias cuya resolución
compete a otros poderes de un Estado democrático”.
También volvió a criticar el régimen de convertibilidad: “bastó
liberar las variables reprimidas para que la realidad de una
burbuja, basada precisamente en un endeudamiento creciente, se
pusiera en evidencia”, según dijo.
Para Lavagna, “ahora es el momento de mirar hacia adelante con
moderación y clara conciencia de que de esto no se sale si no
somos capaces de asegurar el crecimiento”.
“Esperamos que el FMI entienda que la situación actual, con la
grave acumulación de deuda interna y externa, no es el resultado
de un hecho inesperado y súbito”, señaló Lavagna.
Asimismo, el funcionario recordó que “diversos gobiernos argentinos firmaron un total de 19 acuerdos con el FMI desde 1958 en adelante, de los cuales 15 -un número asombroso- fueron incumplidos. El último acuerdo, firmado a fines de 2001, duró apenas unas pocas semanas”.
“Esta pésima perfomance es el resultado de dos políticas
erróneas. Del lado de Argentina, lo que puede definirse como el
´sí fácil´, algo así como ´firmemos cualquier cosa y luego
veremos´. Los resultados de esa actitud están a la vista”,
puntualizó.
El titular del Palacio de Hacienda indicó que “del lado del FMI, los fracasos son el resultado de plantear metas tanto cuantitativas como estructurales irrealistas por sus implicaciones políticas y
sociales, y erradas desde el punto de vista económico. Esto es una
política de apretar para cubrirse”.
“Basta de ´luego veremos´, basta de ´chantadas´. Cumplir es de
por sí bastante difícil como para, además, prometer en exceso”,
enfatizó Lavagna.
El ministro sostuvo además que “este gobierno no quiere asumir
compromisos incumplibles (como ajustes excesivos de tarifas),
compromisos que en su momento consideramos errados (canje
compulsivo de depósitos por bonos) o exigencias cuya resolución
compete a otros poderes de un Estado democrático”.
También volvió a criticar el régimen de convertibilidad: “bastó
liberar las variables reprimidas para que la realidad de una
burbuja, basada precisamente en un endeudamiento creciente, se
pusiera en evidencia”, según dijo.
Para Lavagna, “ahora es el momento de mirar hacia adelante con
moderación y clara conciencia de que de esto no se sale si no
somos capaces de asegurar el crecimiento”.
