Por otra parte, Lavagna aseguró que “Latinoamérica sufrirá un problema generalizado de sobreendeudamiento” debido a que “la alta liquidez de la década del ´90 llevó a los gobiernos a políticas de un sobreendeudamiento fenomenal”. Y agregó que “esa es una limitación para cualquier administración que llega al poder”.
En otro orden, Lavagna reclamó a los acreedores de la Argentina una quita o prolongación de vencimientos de la deuda del país con el fin de que se pueda hacer frente a los compromisos asumidos.
Lavagna formuló el pedido para los tenedores de títulos de la
deuda externa argentina y los organismos de crédito internacional
a horas de su nueva visita a Washington, fijada para dialogar con
funcionarios del FMI.
Lavagna viajará este miércoles por la noche hacia Washington, donde
tiene su sede el FMI, para reclamar apoyo a funcionarios de ese
organismo y del Tesoro de los Estados Unidos para el próximo
gobierno que surja de las elecciones.
Además, añadió que el nivel de endeudamiento de la Argentina
“está en el orden de los 60.000 Millones de dólares, por lo menos
en una primera instancia”.
Y afirmó que ve varias alternativas, como “una quita, que se verá
en su momento, vencimientos más amplios o reducción de tasas de
interés”, para que el país pueda hacer frente a sus compromisos de
pago de deuda.
En tanto, el ministro de Economía dijo que América Latina “se va a
enfrentar a un mal generalizado en casi toda” la región, que “es
una situación de sobreendeudamiento”.
En una entrevista que publicó el diario El País de Madrid,
Lavagna señaló: “La alta liquidez de la década de los 90 llevó a
los gobiernos a políticas de un sobreendeudamiento fenomenal”.
El ministro agregó que “esta es una limitación para cualquier
administración que llega al poder”, en referencia, especialmente,
a Brasil.
El titular de la cartera de Economía señaló que espera que el
próximo Gobierno pueda “tener una transición tranquila, que se le
dé margen a la próxima administración, un poco al estilo
brasileño, y espero que los gobiernos del G-7 y los organismos
financieros pueden adoptar políticas razonables, flexibles y darle
tiempo a quienes están llegando”.
Las frases de Lavagna parecieron convertirse en respuestas a
las declaraciones de Anoop Singh, director del Departamento del
Hemisferio Occidental del FMI y a cargo del “caso argentino”.
Singh reclamó a los partidos políticos de la Argentina que
apoyen el acuerdo con el FMI y señaló que el país tiene al menos
una lección que aprender de Brasil.
El funcionario del FMI elogió a Brasil al señalar que “ha
completado una transición política compleja de manera ejemplar”.
El ministro reconoció que la nueva crisis de Irak podría hacer
desaparecer del interés mundial la situación argentina, pero, en
este caso, concluyó que “sería una bendición desaparecer del
interés de los capitales especulativos, porque el endeudamiento y
la crisis son el resultado de los llamados mercados emergentes”.
Por otra parte, Lavagna aseguró que “Latinoamérica sufrirá un problema generalizado de sobreendeudamiento” debido a que “la alta liquidez de la década del ´90 llevó a los gobiernos a políticas de un sobreendeudamiento fenomenal”. Y agregó que “esa es una limitación para cualquier administración que llega al poder”.
En otro orden, Lavagna reclamó a los acreedores de la Argentina una quita o prolongación de vencimientos de la deuda del país con el fin de que se pueda hacer frente a los compromisos asumidos.
Lavagna formuló el pedido para los tenedores de títulos de la
deuda externa argentina y los organismos de crédito internacional
a horas de su nueva visita a Washington, fijada para dialogar con
funcionarios del FMI.
Lavagna viajará este miércoles por la noche hacia Washington, donde
tiene su sede el FMI, para reclamar apoyo a funcionarios de ese
organismo y del Tesoro de los Estados Unidos para el próximo
gobierno que surja de las elecciones.
Además, añadió que el nivel de endeudamiento de la Argentina
“está en el orden de los 60.000 Millones de dólares, por lo menos
en una primera instancia”.
Y afirmó que ve varias alternativas, como “una quita, que se verá
en su momento, vencimientos más amplios o reducción de tasas de
interés”, para que el país pueda hacer frente a sus compromisos de
pago de deuda.
En tanto, el ministro de Economía dijo que América Latina “se va a
enfrentar a un mal generalizado en casi toda” la región, que “es
una situación de sobreendeudamiento”.
En una entrevista que publicó el diario El País de Madrid,
Lavagna señaló: “La alta liquidez de la década de los 90 llevó a
los gobiernos a políticas de un sobreendeudamiento fenomenal”.
El ministro agregó que “esta es una limitación para cualquier
administración que llega al poder”, en referencia, especialmente,
a Brasil.
El titular de la cartera de Economía señaló que espera que el
próximo Gobierno pueda “tener una transición tranquila, que se le
dé margen a la próxima administración, un poco al estilo
brasileño, y espero que los gobiernos del G-7 y los organismos
financieros pueden adoptar políticas razonables, flexibles y darle
tiempo a quienes están llegando”.
Las frases de Lavagna parecieron convertirse en respuestas a
las declaraciones de Anoop Singh, director del Departamento del
Hemisferio Occidental del FMI y a cargo del “caso argentino”.
Singh reclamó a los partidos políticos de la Argentina que
apoyen el acuerdo con el FMI y señaló que el país tiene al menos
una lección que aprender de Brasil.
El funcionario del FMI elogió a Brasil al señalar que “ha
completado una transición política compleja de manera ejemplar”.
El ministro reconoció que la nueva crisis de Irak podría hacer
desaparecer del interés mundial la situación argentina, pero, en
este caso, concluyó que “sería una bendición desaparecer del
interés de los capitales especulativos, porque el endeudamiento y
la crisis son el resultado de los llamados mercados emergentes”.