El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) invocó el capítulo VII de la Carta de ese organismo internacional y autorizó ayer el envío de una fuerza multinacional a Timor Oriental, que tendrá derecho a abrir fuego, en caso de ser necesario. Pasadas las dos de la madrugada, los 15 países integrantes del Consejo resolvieron permitir que la fuerza utilice “todas las medidas necesarias” para detener el derramamiento de sangre en la ex colonia portuguesa. El objetivo principal de la fuerza multinacional será el de restaurar la paz y garantizar que el territorio anexado por Indonesia en 1976 pueda transitar hacia la independencia expresada por sus habitantes el pasado 30 de agosto. Sin embargo, los 8.000 soldados que ingresarán en Timor Oriental el sábado, y que serán liderados por Australia, deberán cooperar con Indonesia. El primer ministro australiano, John Howard, advirtió a la población de su país que podría haber bajas australianas. “Habrá peligro, puede que haya víctimas, y los australianos deben entenderlo”, sostuvo Howard.
(Página/12, Clarín)
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) invocó el capítulo VII de la Carta de ese organismo internacional y autorizó ayer el envío de una fuerza multinacional a Timor Oriental, que tendrá derecho a abrir fuego, en caso de ser necesario. Pasadas las dos de la madrugada, los 15 países integrantes del Consejo resolvieron permitir que la fuerza utilice “todas las medidas necesarias” para detener el derramamiento de sangre en la ex colonia portuguesa. El objetivo principal de la fuerza multinacional será el de restaurar la paz y garantizar que el territorio anexado por Indonesia en 1976 pueda transitar hacia la independencia expresada por sus habitantes el pasado 30 de agosto. Sin embargo, los 8.000 soldados que ingresarán en Timor Oriental el sábado, y que serán liderados por Australia, deberán cooperar con Indonesia. El primer ministro australiano, John Howard, advirtió a la población de su país que podría haber bajas australianas. “Habrá peligro, puede que haya víctimas, y los australianos deben entenderlo”, sostuvo Howard.
(Página/12, Clarín)