<p>Esencialmente, esta nueva tabla de salvataje para banqueros busca atraer capitales para asociarse con el Estado en un “programa mixto de inversión” (PPIB: public-private investment program). Su meta es comprar poco más de un billón en activos tóxicos –malas hipotecas inclusive- que pesan sobre el sistema bancario y el crédito.<br />
Pese al repliegue bursátil parcial del martes, los aspectos esenciales del esquema siguen apuntalando los mercados de Asia-Pacífico y Europa occidental. Similar sesgo exhiben los futuros accionarios en Estados Unidos, Brasil y México. <br />
Al principio, el PPIB proveerá financiamiento por unos US$ 500.000 millones para descargar esos paquetes en libros. Ahora, el gobierno apela a otro eufemismo, “activos legados”, para no decir “tóxicos”. El objeto es alcanzar el billón, explica un resumen hecho circular por la secretaría del Tesoro.<br />
El núcleo crítico es una masa de US$ 75.000 a 100.000 millones remanentes del megarrescate por US$ 700.000 millones. Puesto en marcha durante octubre, era fruto de Henry Paulson (Tesoro), Timothy Geithner –entonces en la Reserva Federal neoyorquina- y Neel Kashkari (ex Goldman Sachs). Se lo conoce como programa pro alivio de activos en problemas (TARP en inglés). <br />
Al apalancar el nuevo plan vía la agencia federal para seguros de depósitos (FDIC), será posible ir adquiriendo crecientes volúmenes de malos préstamos y los paquetes derivados de su titulización. Los inversores privados podrán subsidiarse, pero también perder la colocación. El gobierno espera que participen fondos jubilatorios y otras instituciones proclives al largo plazo. Escépticos como Paul Krugman temen que Geithner se equivoque al creer que el sistema financiero sea tan sano como lo supone la RF. </p>
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La letra chica del plan del billón de dólares
En realidad, se trata del segundo programa cifrado en activos tóxicos. Sumándole ese billón al megarrescate de octubre se llega a 1,7 billón. Si se añade el déficit planteado en el presupuesto 2009/10 (1,75 billón), se llega a US$ 3,45 billones.