domingo, 24 de noviembre de 2024

La Economía Circular ayuda contra el calentamiento global

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Como todos los años, el 22 de abril se celebra el Día Mundial de la Madre Tierra, para recordar que es nuestro hogar y debemos cuidarlo para conservar sus recursos naturales para las futuras generaciones.

Para Ecoplas, la asociación civil sin fines de lucro especializada en plásticos y medioambiente, son necesarias políticas públicas y educación para mejorar la separación, las tecnologías de recogida, clasificación y reciclaje de los plásticos con el fin de obtener mayores cantidades de plásticos y de mejor calidad. Su durabilidad, eficiencia en términos de energía y recursos, además de su reciclabilidad, facilitan la circularidad para lograr una sociedad baja en carbono.

Esto significa promover el uso de plásticos más fáciles de reciclar, crear productos de ecodiseño con un mayor contenido de reciclados, facilitar la reutilización y reparación de los productos, y mejorar la gestión de los residuos plásticos, transformándolos en nuevos recursos para reducir el uso de materias primas fósiles.

“Queremos destacar que el reciclado de plásticos en Argentina evitó que se liberaran unas 400 mil toneladas de dióxido de carbono al año en 2021, el equivalente a lo que absorben 18 millones de árboles”, explicó Verónica Ramos, Directora General de Ecoplas. “Los plásticos son uno de los materiales que menor cantidad de gases de efecto invernadero emiten durante todo su Ciclo de Vida y, de este modo, nos ayudan a proteger el ambiente. Sobre otros materiales sustitutos como vidrio, papel, cartón y metales, los plásticos consumen un 55% menos de energía, emiten 63% menos de gas efecto invernadero y su peso total es un 72% inferior”.

Los plásticos desempeñan un papel principal en esta transición hacia un futuro sostenible y con cero emisiones netas. Por ejemplo, a través de los vehículos eléctricos, parques eólicos y viviendas energéticamente eficientes. También existen durmientes hechos con plástico reciclado que evitan la deforestación de árboles de especies autóctonas protegidas. Así, se aprovechan los residuos plásticos y se evita su desperdicio. Cada durmiente utiliza 70 kilogramos de plástico reciclado (unas 1800 botellas de plástico) y en 1 kilómetro de vía se utilizan 130 toneladas de plástico.

La transición a la economía circular de los plásticos es una realidad. Actualmente, el sector está implementando diferentes medidas, como:

Ecodiseño: Permite el ahorro de recursos, la reutilización y reciclaje de los productos.
Desarrollo de nuevas tecnologías: como es el caso del reciclaje químico. Este proceso permite reciclar los flujos mixtos de residuos plásticos, que no pueden procesarse mediante el reciclaje mecánico. Ofrece nuevas posibilidades para la economía circular.

Para aprovechar toda la contribución de los plásticos para combatir el calentamiento global, éstos deben ser reciclados y recuperados dentro de la economía circular, donde no terminan como “residuos” sino que vuelven a ser reaprovechados como recursos.

Para ello, Ecoplas plantea poner en práctica la estrategia de las 7R. Cada R representa una acción positiva dentro de este nuevo enfoque integral del consumo responsable.

1. Rediseñar: aplicar estrategia de diseño de los materiales que contengan plástico para asegurar que contengan sólo la cantidad necesaria y que puedan ser fácilmente integrados a una etapa de revalorización post consumo.
2. Reducir: evitar el consumo excesivo limitándonos sólo de aquellos productos plásticos necesarios.
3. Reutilizar: aprovechar los materiales plásticos todas las veces que sea posible.Son resistentes y duraderos por lo que podemos aprovecharlos en varias oportunidades antes de descartarlos.
4. Reparar: considerar las ventajas en la reparación de aquellos materiales que se han dañado como pueden ser los electrodomésticos u otros equipos.
5. Renovar: el concepto implica un proceso de actualización de los objetos para que puedan volver “mejorados” a la función para la que fueron creados o en otras aplicaciones que pueden ser de utilidad.
6. Reciclar: comprender que los plásticos son un recurso aun cuando ya no cumplan una función para nosotros. Al reciclarlos se convierten en la materia prima de un proceso que dará lugar a nuevos productos.
7. Recuperación energética: cuando no puedan ser reciclados, es importante aprovechar el contenido energético en procesos industriales específicos. Esta opción evita el consumo de recursos vírgenes y permite que el plástico no deba ser dispensado como un residuo.

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