Kirchner no viaja a Cuba

Al trascender la información, el jefe de Gabinete de la Cancillería, Eduardo Valdés, se apuró en aclarar que la suspensión de la visita a la isla responde a cuestiones "técnicas" y no a presiones de Washington.

15 enero, 2004

Valdés sostuvo que para adoptar la decisión “no tuvo nada que
ver” el “conflicto” que se había planteado la semana pasada con
Washington, cuando el funcionario del Departamento de Estado
norteamericano Roger Noriega criticó a la Argentina por su
relación con La Habana y por dar un “giro a la izquierda” en su
política exterior.

“Creemos que todavía había que evolucionar, madurar un poco más
el tema de la presencia del Presidente en Cuba”, explicó el jefe de Gabinete de Cancillería.

El canciller Bielsa había anunciado el viaje presidencial a La
Habana el 13 de octubre pasado, luego de que se entrevistara con
Fidel Castro en la capital cubana.

Dos semanas atrás, Kirchner había señalado que no estaba
definido si viajaría o no a Cuba el mes próximo, lo que había sido
reiterado también por distintos funcionarios en las últimas
horas.

Ayer por la mañana, el gobierno comenzó a poner en duda
que Kirchner fuera a viajar, a través de una declaración del jefe
de Gabinete, Alberto Fernández. El funcionario dijo en esa
oportunidad que ni siquiera recordaba haber visto en “la agenda”
presidencial el tema del viaje a Cuba.

Finalmente, en la víspera, el presidente Kirchner puso fin a una serie de especulaciones, al señalar que no tiene “previsto ningún viaje cercano a Cuba”.

De todos modos, el gobierno ratificó que la Argentina no
modificará su política hacia la isla y que no condenará al régimen
cubano cuando en abril próximo haya que votan en la Comisión de
Derechos Humanos de la ONU.

Valdés sostuvo que para adoptar la decisión “no tuvo nada que
ver” el “conflicto” que se había planteado la semana pasada con
Washington, cuando el funcionario del Departamento de Estado
norteamericano Roger Noriega criticó a la Argentina por su
relación con La Habana y por dar un “giro a la izquierda” en su
política exterior.

“Creemos que todavía había que evolucionar, madurar un poco más
el tema de la presencia del Presidente en Cuba”, explicó el jefe de Gabinete de Cancillería.

El canciller Bielsa había anunciado el viaje presidencial a La
Habana el 13 de octubre pasado, luego de que se entrevistara con
Fidel Castro en la capital cubana.

Dos semanas atrás, Kirchner había señalado que no estaba
definido si viajaría o no a Cuba el mes próximo, lo que había sido
reiterado también por distintos funcionarios en las últimas
horas.

Ayer por la mañana, el gobierno comenzó a poner en duda
que Kirchner fuera a viajar, a través de una declaración del jefe
de Gabinete, Alberto Fernández. El funcionario dijo en esa
oportunidad que ni siquiera recordaba haber visto en “la agenda”
presidencial el tema del viaje a Cuba.

Finalmente, en la víspera, el presidente Kirchner puso fin a una serie de especulaciones, al señalar que no tiene “previsto ningún viaje cercano a Cuba”.

De todos modos, el gobierno ratificó que la Argentina no
modificará su política hacia la isla y que no condenará al régimen
cubano cuando en abril próximo haya que votan en la Comisión de
Derechos Humanos de la ONU.

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