Jujuy: protesta con incidentes
La policía reprimió una marcha de estatales y docentes que reclaman sueldos atrasados Docentes tomaron el Consejo de Educación.
Graves incidentes se produjeron entre trabajadores estatales y efectivos policiales frente a la Casa de Gobierno jujeña, durante una manifestación por los sueldos y otras reivindicaciones. La policía reprimió la marcha recordando –aunque con menor gravedad– lo que ocurrió esta misma semana en la provincia de San Luis, donde las fuerzas de seguridad locales reprimieron –fuertemente–una manifestación.
La refriega en Jujuy comenzó cuando la marcha llegó a la Casa de Gobierno y los dirigentes encabezados por Santillán y Fernando Acosta, intentaron ocupar las escalinatas, ante lo cual la Guardia de Infantería, con escudos, les impidió el paso. Entonces comenzaron los empujones, golpes y empellones; explotaron granadas de gases y las piedras cayeron sobre la policía, mientras varios grupos se retiraron a los rincones de la plaza. Luego de un momento de tensa espera, los manifestantes volvieron a la carga y la represión se desató violentamente. Varios heridos fueron trasladados, sangrantes, al hospital San Roque, en la esquina de la plaza, y muchos escaparon del humo hacia el atrio de la catedral.
Graves incidentes se produjeron entre trabajadores estatales y efectivos policiales frente a la Casa de Gobierno jujeña, durante una manifestación por los sueldos y otras reivindicaciones. La policía reprimió la marcha recordando –aunque con menor gravedad– lo que ocurrió esta misma semana en la provincia de San Luis, donde las fuerzas de seguridad locales reprimieron –fuertemente–una manifestación.
La refriega en Jujuy comenzó cuando la marcha llegó a la Casa de Gobierno y los dirigentes encabezados por Santillán y Fernando Acosta, intentaron ocupar las escalinatas, ante lo cual la Guardia de Infantería, con escudos, les impidió el paso. Entonces comenzaron los empujones, golpes y empellones; explotaron granadas de gases y las piedras cayeron sobre la policía, mientras varios grupos se retiraron a los rincones de la plaza. Luego de un momento de tensa espera, los manifestantes volvieron a la carga y la represión se desató violentamente. Varios heridos fueron trasladados, sangrantes, al hospital San Roque, en la esquina de la plaza, y muchos escaparon del humo hacia el atrio de la catedral.
