Juicio oral a un hombre que taló un árbol

Juan Carlos García sacó un fresno de la vereda sin pedir permiso y ahora podría ir a la cárcel. Un fiscal lo acusa de "daño agravado".

4 agosto, 1999

Juan Carlos García quitó de enfrente de su casa, ubicada en Maure al 1700, en la Capital Federal, un fresno que según él estaba seco y puso otro árbol en su lugar. El vecino del barrio porteño de Belgrano no tenía autorización de la comuna para voltear el árbol y ahora, después de más de un año, está acusado del delito de “daño agravado”. García deberá afrontar a partir de mañana un juicio oral: la sentencia, en caso de ser hallado culpable, podría ir de tres meses a cuatro años de prisión, según la pena que impone el artículo 184 del Código Penal. En realidad, la Justicia Contravencional se limita a penar con “10 a 100 unidades multa” -entre 10 y 100 pesos- a quienes dañaron un árbol. Pero en el caso de García, el fiscal N° 3 José María Campagnoli entendió que el vecino había cometido un delito y no una falta y por eso lo acusó de “daños agravados”. La denuncia contra el quiosquero de 53 años no fue realizada por el Gobierno porteño, sino que debe haber sido efectuada por algún vecino, indicaron ayer en la comuna.
(Página/12, Clarín)

Juan Carlos García quitó de enfrente de su casa, ubicada en Maure al 1700, en la Capital Federal, un fresno que según él estaba seco y puso otro árbol en su lugar. El vecino del barrio porteño de Belgrano no tenía autorización de la comuna para voltear el árbol y ahora, después de más de un año, está acusado del delito de “daño agravado”. García deberá afrontar a partir de mañana un juicio oral: la sentencia, en caso de ser hallado culpable, podría ir de tres meses a cuatro años de prisión, según la pena que impone el artículo 184 del Código Penal. En realidad, la Justicia Contravencional se limita a penar con “10 a 100 unidades multa” -entre 10 y 100 pesos- a quienes dañaron un árbol. Pero en el caso de García, el fiscal N° 3 José María Campagnoli entendió que el vecino había cometido un delito y no una falta y por eso lo acusó de “daños agravados”. La denuncia contra el quiosquero de 53 años no fue realizada por el Gobierno porteño, sino que debe haber sido efectuada por algún vecino, indicaron ayer en la comuna.
(Página/12, Clarín)

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