El producto bruto interno japonés se contrajo a razón de 0,4% anual de julio a septiembre después de declinar 3,7% en el trimestre anterior, dijo el gobierno el lunes 17. Es la primera vez desde 2001 que la economía japonesa se contrae en dos trimestres consecutivos, o sea, la definición de una recesión.
Esta declinación se suma al lúgubre panorama para la economía global, luego de que Hong Kong y la Unión Europea publicaran cifran que muestran también recesión. Alemania, la economía más grande de europa, también anunció la semana pasada que está en recesión.
Podría seguir Estados Unidos, luego de que Washington dijera el mes pasado que la economía estadounidense se contrajo en el tercer trimestre.
Estas cifras son peores de lo que esperaban los economistas, que habían previsto que la economía japonesa evitaría la recesión y mostraría algún crecimiento.
Hasta ahora, Japón se mantenía apartado de la mayoría de las naciones porque sus bancos salieron relativamente ilesos de la crisis financiera. Pero los datos del lunes mostraron que las aflicciones estadounidenses llegaron a Japón mediante sus exportaciones, pues los estadounidenses gastan menos en autos, televisores y máquinas herramientas japonesas.
A Japón le afectan especialmente esos vaivenes de la economía más grande del mundo (la de Estados Unidos) porque su crecimiento es muy dependiente de las ventas a ese mercado.
El producto bruto interno japonés se contrajo a razón de 0,4% anual de julio a septiembre después de declinar 3,7% en el trimestre anterior, dijo el gobierno el lunes 17. Es la primera vez desde 2001 que la economía japonesa se contrae en dos trimestres consecutivos, o sea, la definición de una recesión.
Esta declinación se suma al lúgubre panorama para la economía global, luego de que Hong Kong y la Unión Europea publicaran cifran que muestran también recesión. Alemania, la economía más grande de europa, también anunció la semana pasada que está en recesión.
Podría seguir Estados Unidos, luego de que Washington dijera el mes pasado que la economía estadounidense se contrajo en el tercer trimestre.
Estas cifras son peores de lo que esperaban los economistas, que habían previsto que la economía japonesa evitaría la recesión y mostraría algún crecimiento.
Hasta ahora, Japón se mantenía apartado de la mayoría de las naciones porque sus bancos salieron relativamente ilesos de la crisis financiera. Pero los datos del lunes mostraron que las aflicciones estadounidenses llegaron a Japón mediante sus exportaciones, pues los estadounidenses gastan menos en autos, televisores y máquinas herramientas japonesas.
A Japón le afectan especialmente esos vaivenes de la economía más grande del mundo (la de Estados Unidos) porque su crecimiento es muy dependiente de las ventas a ese mercado.
