El Primer Ministro reconoció su derrota en un emotivo discurso en el que dijo que renuncia “con un nudo en la garganta”. “Mi experiencia en el gobierno termina aquí… hice todo lo que pude por llevar esto a la victoria”, dijo Renzi . “Si uno lucha por una idea, no puede perder”.
Si bien la derrota no fue sorpresa, lo que sorprendió es que fue humillante: 59% de los italianos votaron contra las propuestas que proponía el Premier, que implicaban profundas reformas a la Constitución y al sistema parlamentario.
Los grandes ganadores fueron el Movimento 5 Stelle (M5S) — un partido fundado en 2009 por Beppe Grillo, comediante y bloguero y Gianroberto Casaleggio un estratega de la web — y la Liga Norte, un partido político de extrema derecha afincado en las regiones del norte del país. La Liga Norte es el partido nacionalista, conservador y xenófobo. Su joven líder, Matteo Salvini vociferaba su mensaje en las plazas de los pueblos azuzando el miedo de los más desfavorecidos: “si por culpa de la crisis solo hay un euro para repartir, que ese euro sea para los italianos”.
El diario El País de Madrid cita hoy las palabras con que Matteo Renzi retrucaba ese argumento hace un par de días: “Hay quienes por semanas y meses han ocupado el Talk Show diciendo que la inmigración es un problema del Gobierno italiano , no dándose cuenta de que hay un nivel de humanidad bajo el cual no se puede descender . No se dan cuenta que, frente a esta imagen (la del niño muerto en la playa) no entra en confrontación la izquierda contra la derecha, sino los humanos contra las bestias”.