Una de esas medidas sería, por ejemplo, facilitar la residencia de los británicos que ya están viviendo en Francia.
El anuncio se produce después que el Primer Ministro, Edouard Philippe, llamó a una reunión especial de ministros para preparase para lo que llamó “este desafío sin precedentes”, aunque tanto Francia como el Reino Unido ( y la Unión Europea) dicen que todavía siguen intentando una salida ordenada con acuerdo.
El gobierno francés estará buscando también formas de “asegurar la mayor fluidez posible en términos de controles fronterizos una vez que el Reino Unido se haya convertido en tercer país para la UE”, dijo la oficina del ministerio.
En las próximas semanas el gobierno presentará “la ley de habilitación” sobre este tema, una especie de ley donde el gobierno busca permiso para dar órdenes en un tema sin un debate en el parlamento (sin embargo, las medidas tomadas deben más tarde ser ratificadas retrospectivamente por el paramento, de lo contrario caducan).
Gran Bretaña (UK) y la Unión Europea han estado intentando finalizar un borrador de acuerdo de salida antes de la cumbre de la UE el 18 de octubre; no obstante, ahora se cree que las conversaciones probablemente se prolonguen hasta noviembre en un esfuerzo de último momento por lograr un “acuerdo”.
En este momento las partes han coincidido en muchas áreas, como los derechos de los expatriados en ambos lados, pero los puntos que quedan incluyen cómo evitar una frontera “dura” entre Irlanda e Irlanda del Norte y acordar un plan maestro para el futuro de la relación entre UE y UK en cuestiones como seguridad, cooperación y comercio.
Mientras tanto la coalición British in Europe (un grupo de ciudadanos británicos que viven y trabajan en Europa), que vienen haciendo campaña para que los británicos en el extranjero mantengan todos sus derechos, cambian ahora su posición anterior de neutralidad para reclamar el fin del Brexit a través de un nuevo referéndum. Dicen que está claro ahora que las alternativas – con acuerdo o sin acuerdo – llevarían a que los británicos pierdan importantes derechos como ciudadanos de la Unión Europea. Uno de ellos, el derecho a trasladarse libremente por la UE.