Del evento organizado por KPMG Argentina y el estudio de abogados White & Case LLP participaron alrededor de 200 empresarios y dirigentes de empresas quienes escucharon las experiencias de los expertos en políticas anticorrupción. El periodista Hugo Alconada Mon dio testimonio sobre su protagonismo en las investigaciones publicadas en sus artículos y libros.
Para analizar los principales temas relacionados con la legislación vigente y la aplicación de la normativa anticorrupción en Argentina y EE. UU. – y su posible impacto en las empresas que operan en América latina y en la Argentina-, KPMG y el estudio de abogados White & Case LLPrealizaron un seminario con la presencia de alrededor de 200 empresarios y directivos de distintas empresas con actividades en el país y en la región.
Los integrantes del panel fueron, por parte de KPMG Argentina, Diego Bleger, socio líder de Risk Consulting; Ana López Espinar, socia líder de Forensic Services; y Hernán Carnovale, socio de Forensic Services; y los socios del equipo de Compliance de América latina de White & Case, Daniel Fridman y Michael Garcia. El invitado especial a cargo del cierre del evento fue Hugo Alconada Mon, abogado y periodista del diario La Nación quien se refirió a sus experiencias vinculadas al Lava Jato de Brasil, y a las investigaciones de la justicia argentina sobre hechos de corrupción pública-privada de la actualidad.
La apertura estuvo a cargo de Néstor García, Socio Director Ejecutivo de KPMG quien dijo: “La corrupción es una cuestión muy presente en el mundo actual y sobre todo en la vida de los países de Latinoamérica, como así también en nuestro país. El equipo de Forensic de KPMG trabaja sobre estos temas desde hace más de 20 años y somos líderes en la actividad. En su compromiso hacia la transparencia, tanto las Administraciones Públicas como numerosas empresas, tienen un largo y complejo camino por recorrer. Deben adaptar no sólo sus estructuras organizativas y su tecnología, sino que deben acompañar este camino con un fuerte cambio en sus procesos y cultura, de modo que los valores y principios no se pierdan en la frase “Muchas normas, poca transparencia“. Al finalizar señaló que “si bien se menciona que el tema de los cuadernos con sus implicancias tiene impacto sobre nuestra economía, considero que esta depuración traerá beneficios a futuro, ya que los inversionistas van a poder actuar en un mercado donde la corrupción sea castigada. El mercado de valores debería salir fortalecido. Esperemos que así sea”.
Un caso hipotético
Luego, panelistas y asistentes al evento trabajaron sobre un hipotético caso de corrupción por sobornos a funcionarios de un gobierno determinado y realizado por una empresa constructora dedicada a la obra pública. “Una de los primeras cosas que habría que preocuparse es si esa empresa tiene relaciones comerciales en Estados Unidos o cotiza en la Bolsa de los Estados Unidos. Porque si existe ese vínculo la empresa puede ser alcanzada por la legislación anticorrupción de Estados Unidos y ser investigada, independientemente de la investigación judicial que se haga localmente”, explicó Daniel Fridmanquien además integró el equipo de la Fiscalía General del Distrito Sur de Florida; y fue Asesor Principal del Vice Fiscal General del Departamento de Justicia de Washington. “Tienen que considerar hacer una investigación interna porque la empresa debe saber qué pasó para estar en la mejor posición para responder a las autoridades y defender la empresa“, agregó.
En esa misma línea, en el marco de la normativa vigente en Argentina,Ana LópezEspinar agregó que “apenas se conoce la información de que pudo haber un hecho de corrupción entre la empresa y el Estado hay que comprobar internamente si el hecho podría haber ocurrido, si las primeras informaciones que se recogen internamente tienen correlato con la denuncia realizada ante la justicia o públicamente. Si eso es comprobado, inmediatamente hay que salvaguardar toda la documentación física y digital que permitirá reconstruir con prueba documental cómo fue el circuito interno, así como determinar montos y responsabilidades. También, es sumamente importante efectuar búsquedas de antecedentes y cruzar el maestro de proveedores con distintas bases de datos para identificar, por ejemplo, si pudo haber facturas apócrifas; o aparecen sospechas de empresas proveedoras que se crearon ad hoc del hecho de corrupción, o no tienen empleados, o presentan facturación correlativa, o hay precios por debajo del mercado que pueden encubrir dádivas. Todos estos datos sospechosos permiten detectar en qué lugar pudo estar el soborno“.
Por su parte,Hernan Carnovale comentó que en el caso de verificarse irregularidades en la obra denunciada, es conveniente investigar desde el momento del hecho de corrupción hacia atrás en el tiempo. “No menos de dos años y si en ese tiempo aparecen nuevas evidencias de hechos sospechosos, conviene seguir investigando hacia atrás hasta eliminar toda duda. Hay que producir toda la prueba documental que se pueda para que la empresa pueda presentar a la Justicia si es citada“. Ambos especialistas a su vez enfatizaron la necesidad y los beneficios de contar con un Plan de Integridad a la medida de los riesgos de la empresa, tal como lo especifica la nueva Ley de Responsabilidad Penal Empresaria.
Al final, Diego Bleger realizó una entrevista a Hugo Alconada Mon en la que se analizaron los hechos de corrupción que son de público conocimiento tanto en la Argentina como en la región. “Los casos de Lava Jato en Brasil y el de los cuadernos en la Argentina no son comparables; son distintos incluso en cómo funciona la justicia de cada país. En la Argentina se puede decir que esto recién empieza, es un proceso en marcha. En cambio, el Lava Jato lleva ya cuatro años con más de 120 políticos y empresarios condenados. La figura del arrepentido aceleró mucho los procesos en ambos países. La pregunta que los argentinos debemos hacernos es hasta dónde llegará la investigación, hasta donde la dejarán llegar. Hay muchos arrepentidos que cuentan estrictamente lo necesario”.
Por último, la conclusión de Bleger fue que “siempre lo mejor para un país y el mundo de los negocios es la transparencia y asumir responsabilidades si las hubiera. Al final del camino se genera un país mejor, más competitivo, con mejores costos, productos y servicios. En una palabra, un país más confiable para todos“.
