El senado se negó a prorrogar la emergencia económica

El oficialismo no logró reunir en la Cámara de Senadores los dos tercios que le permitieran aprobar el proyecto de prórroga de la ley de emergencia económica hasta el 31 de diciembre de 2008, que cuenta con media sanción de Diputados.

6 diciembre, 2007

Si bien aún no asumieron los nuevos senadores votados el 28 de octubre
último, la dificultad con que se tropezó la iniciativa de la presidenta
electa Cristina Fernández de Kirchner significa un toque de atención
sobre el rol que cumplirá el Congreso durante su mandato.

La votación fue 28 a favor y 17 en contra, por lo que el kirchnerismo
quedó a dos votos de lograr su cometido, razón por la que el tratamiento
de la ley pasa a la semana que viene, como proponía el radicalismo.

La intención de la presidenta electa era que, a modo de despedida, la
Cámara que integrara sacara la medida antes del recambio, pero quien
fuera su amanuense, el titular del bloque, Miguel Angel Pichetto, no pudo garantizárselo.

La ley de Emergencia vence el próximo 31 de diciembre y la prórroga
prevé que la facultad de la Casa Rosada para renegociar contratos y tarifas
con las empresas de servicios públicos se extenderá un año
más. Ese poder también habilitaría al gobierno para renegociar
la deuda con el Club de París, además de prorrogar la emergencia
sanitaria y social.

Cristina Fernández de Kirchner se reunió con los jefes del bloque
oficialista en el Congreso, Agustín Rossi y Miguel Angel Pichetto, para
pedirles la aprobación de dos leyes claves para el inicio de su gestión
presidencial. Ambos concurrieron al despacho que Cristina de Kirchner tiene
en la Casa Rosada, según informó la agencia de noticias DyN. De
la reunión participó también el actual jefe de Gabinete,
Alberto Fernández.

El Senado tiene pendiente de aprobación, además de la prórroga
de la ley de Emergencia Económica, el Presupuesto 2008, ya avalados en
Diputados.

Si bien el kirchnerismo había tenido dificultades para conseguir quórum
en la Cámara baja, logró que le aprobaran la prórroga de
la emergencia económica.

También dio media sanción a la nueva Ley de Ministerios, que entre
otros puntos, avala la creación de la nueva cartera de Ciencia y Técnica.

Juramento

Los diputados elegidos el 28 de octubre prestarán juramento hoy en una
sesión en la que, además, serán designadas las nuevas autoridades
del cuerpo legislativo, que presidirá el jujeño Eduardo Fellner,
tal como informó la agencia oficial “Télam”.

La asamblea, convocada para las 11, exhibirá claramente el nuevo escenario
político que presentará la Cámara baja a partir del 10
de diciembre. El oficialismo contará para el nuevo período parlamentario
con un bloque de unos 130 legisladores propios y otros 30 aliados, número
que le alcanzará para garantizarse quórum propio y, de esa manera,
la sanción de leyes claves para la continuidad de los Kirchner en el
poder.

Además de Fellner, el oficialismo ratificará también a
la diputada kirchnerista por Córdoba, Patricia Vaca Narvaja, como vicepresidenta
primera.

El oficialismo sostiene que la vicepresidencia segunda de la Cámara
baja “debe ser ocupada por el bloque de la oposición, que tenga
mayor cantidad de legisladores y no por un interbloque”, como pretenden
conformar la Coalición Cívica y el PRO.

De esta manera, el radicalismo -que actualmente ocupa ese cargo por ser la
principal fuerza de oposición- podría retener la vicepresidencia
segunda, con 26 diputados, y propondría a la legisladora chaqueña
Liliana Bavonzo para ese cargo.

El oficialismo ya ratificó la continuidad del santafesino Agustín
Rossi al frente del bloque Frente para la Victoria-PJ, así como la de
la secretaria parlamentaria Patricia Fadel.

El radicalismo, por su parte, eligió al cordobés Oscar Aguad,
ya que Fernando Chironi finaliza su mandato el 10 de diciembre; la Coalición
Cívica, en tanto, ya nominó a Adrián Pérez para
presidir el bloque.

Demora bonaerense

Los que no jurarán hoy serán los diputados nacionales bonaerenses,
porque el escrutinio está demorado y les impide ocupar sus bancas: son
35 en total.
Hasta en la Legislatura provincial, el oficialismo tuvo que elaborar contra
reloj un plan de emergencia para que no corriera riesgo el próximo lunes
la proclamación del gobernador electo, Daniel Scioli.

El escrutinio finalizó en sólo tres de las ocho secciones electorales
y todavía falta abrir urnas en el interior y en distritos clave, como
Lomas de Zamora, La Matanza y Quilmes.

En la justicia electoral creen que la anomalía será superada
la semana próxima. El recuento en la provincia que concentra el 38% de
los votantes del país es el más dificultoso desde la vuelta de
la democracia, en 1983. Hubo el día de la votación candidatos
múltiples en todas las categorías, ausencia de autoridades de
mesa, repetidos cortes de boleta y falta de papeletas.

Los 35 diputados nacionales elegidos en Buenos Aires no pueden asumir porque
para hacer los cálculos legislativos definitivos es necesario tener completo
el escrutinio.

También existe la posibilidad de que se repita esta situación
conflictiva en la Legislatura bonaerense, sobre todo con los senadores de la
Tercera Sección, la región electoral más populosa de la
Argentina (2.491.000 electores). También corre riesgo la asunción
de un puñado de intendentes del conurbano. El distrito más conflictivo:
Lomas de Zamora, donde falta abrir por lo menos 80 urnas y todavía tres
candidatos se adjudican la victoria.

Pero existe una complicación adicional. Como la justicia electoral bonaerense
todavía no ha enviado datos precisos del escrutinio, la demora puso en
riesgo la conformación de la Asamblea Legislativa que el lunes deberá
proclamar gobernador a Scioli.

Si bien aún no asumieron los nuevos senadores votados el 28 de octubre
último, la dificultad con que se tropezó la iniciativa de la presidenta
electa Cristina Fernández de Kirchner significa un toque de atención
sobre el rol que cumplirá el Congreso durante su mandato.

La votación fue 28 a favor y 17 en contra, por lo que el kirchnerismo
quedó a dos votos de lograr su cometido, razón por la que el tratamiento
de la ley pasa a la semana que viene, como proponía el radicalismo.

La intención de la presidenta electa era que, a modo de despedida, la
Cámara que integrara sacara la medida antes del recambio, pero quien
fuera su amanuense, el titular del bloque, Miguel Angel Pichetto, no pudo garantizárselo.

La ley de Emergencia vence el próximo 31 de diciembre y la prórroga
prevé que la facultad de la Casa Rosada para renegociar contratos y tarifas
con las empresas de servicios públicos se extenderá un año
más. Ese poder también habilitaría al gobierno para renegociar
la deuda con el Club de París, además de prorrogar la emergencia
sanitaria y social.

Cristina Fernández de Kirchner se reunió con los jefes del bloque
oficialista en el Congreso, Agustín Rossi y Miguel Angel Pichetto, para
pedirles la aprobación de dos leyes claves para el inicio de su gestión
presidencial. Ambos concurrieron al despacho que Cristina de Kirchner tiene
en la Casa Rosada, según informó la agencia de noticias DyN. De
la reunión participó también el actual jefe de Gabinete,
Alberto Fernández.

El Senado tiene pendiente de aprobación, además de la prórroga
de la ley de Emergencia Económica, el Presupuesto 2008, ya avalados en
Diputados.

Si bien el kirchnerismo había tenido dificultades para conseguir quórum
en la Cámara baja, logró que le aprobaran la prórroga de
la emergencia económica.

También dio media sanción a la nueva Ley de Ministerios, que entre
otros puntos, avala la creación de la nueva cartera de Ciencia y Técnica.

Juramento

Los diputados elegidos el 28 de octubre prestarán juramento hoy en una
sesión en la que, además, serán designadas las nuevas autoridades
del cuerpo legislativo, que presidirá el jujeño Eduardo Fellner,
tal como informó la agencia oficial “Télam”.

La asamblea, convocada para las 11, exhibirá claramente el nuevo escenario
político que presentará la Cámara baja a partir del 10
de diciembre. El oficialismo contará para el nuevo período parlamentario
con un bloque de unos 130 legisladores propios y otros 30 aliados, número
que le alcanzará para garantizarse quórum propio y, de esa manera,
la sanción de leyes claves para la continuidad de los Kirchner en el
poder.

Además de Fellner, el oficialismo ratificará también a
la diputada kirchnerista por Córdoba, Patricia Vaca Narvaja, como vicepresidenta
primera.

El oficialismo sostiene que la vicepresidencia segunda de la Cámara
baja “debe ser ocupada por el bloque de la oposición, que tenga
mayor cantidad de legisladores y no por un interbloque”, como pretenden
conformar la Coalición Cívica y el PRO.

De esta manera, el radicalismo -que actualmente ocupa ese cargo por ser la
principal fuerza de oposición- podría retener la vicepresidencia
segunda, con 26 diputados, y propondría a la legisladora chaqueña
Liliana Bavonzo para ese cargo.

El oficialismo ya ratificó la continuidad del santafesino Agustín
Rossi al frente del bloque Frente para la Victoria-PJ, así como la de
la secretaria parlamentaria Patricia Fadel.

El radicalismo, por su parte, eligió al cordobés Oscar Aguad,
ya que Fernando Chironi finaliza su mandato el 10 de diciembre; la Coalición
Cívica, en tanto, ya nominó a Adrián Pérez para
presidir el bloque.

Demora bonaerense

Los que no jurarán hoy serán los diputados nacionales bonaerenses,
porque el escrutinio está demorado y les impide ocupar sus bancas: son
35 en total.
Hasta en la Legislatura provincial, el oficialismo tuvo que elaborar contra
reloj un plan de emergencia para que no corriera riesgo el próximo lunes
la proclamación del gobernador electo, Daniel Scioli.

El escrutinio finalizó en sólo tres de las ocho secciones electorales
y todavía falta abrir urnas en el interior y en distritos clave, como
Lomas de Zamora, La Matanza y Quilmes.

En la justicia electoral creen que la anomalía será superada
la semana próxima. El recuento en la provincia que concentra el 38% de
los votantes del país es el más dificultoso desde la vuelta de
la democracia, en 1983. Hubo el día de la votación candidatos
múltiples en todas las categorías, ausencia de autoridades de
mesa, repetidos cortes de boleta y falta de papeletas.

Los 35 diputados nacionales elegidos en Buenos Aires no pueden asumir porque
para hacer los cálculos legislativos definitivos es necesario tener completo
el escrutinio.

También existe la posibilidad de que se repita esta situación
conflictiva en la Legislatura bonaerense, sobre todo con los senadores de la
Tercera Sección, la región electoral más populosa de la
Argentina (2.491.000 electores). También corre riesgo la asunción
de un puñado de intendentes del conurbano. El distrito más conflictivo:
Lomas de Zamora, donde falta abrir por lo menos 80 urnas y todavía tres
candidatos se adjudican la victoria.

Pero existe una complicación adicional. Como la justicia electoral bonaerense
todavía no ha enviado datos precisos del escrutinio, la demora puso en
riesgo la conformación de la Asamblea Legislativa que el lunes deberá
proclamar gobernador a Scioli.

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