(DYN). – El Gobierno obtuvo un monumental blindaje financiero de US$ 39.700 millones, de acuerdo con lo anunciado hoy (lunes 18) por el presidente Fernando de la Rúa.
El Presidente de la Rúa afirmó que la ayuda financiera internacional “tiene una importancia inusitada” que permitirá al país “encarar la recuperación económica”.
Según lo programado, de los US$ 39.700 millones, 25.400 millones se desembolsarán hasta el 31 de diciembre de 2001 y en lo que resta del año en curso estarán disponibles 2.100 millones, explicó el ministro de Economía, José Luis Machinea.
A partir de este momento, la estrategia del gobierno nacional –aseguró Machinea– será “esperar” hasta que los mercados estén dispuestos a financiar al país a “tasas razonables”.
La composición del blindaje es la siguiente: US$ 13.700 millones aportados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), 2.500 millones por el Banco Mundial, otros 2.500 millones por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), 1.000 millones por España, 10.000 millones por un conjunto de bancos privados, 3.000 millones por las AFJP y 7.000 millones por operaciones de canje de deuda.
De la Rúa retomó esta mañana su costumbre –últimamente delegada en el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo– de encabezar la reunión de ministros, esta vez realizada en la quinta de Olivos, para evaluar la instrumentación de la ayuda financiera.
Al ingresar al encuentro, la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, vaticinó una “baja significativa” en la tasa de desocupación a partir de este blindaje.
“No quiero dar números, pero creemos que va a haber una baja significativa del desempleo. Si ahora se aprovecha este impulso positivo se va a ver reflejado rápidamente en la baja de las cifras de la desocupación”, sostuvo Bullrich.
En declaraciones a la prensa, Bullrich señaló que “si logramos rápidamente que se baje la tasa de interés, lo que significa que se empiece a mover la economía, sobre todo las Pymes, creemos que hay muchos pequeños inversores, comercios y servicios que este año no tomaron decisiones y que las van a tomar”.
Machinea, por su parte, se refirió en el mismo sentido, en un diálogo con el canal de cable Todo Noticias, al considerar que la confianza que el blindaje provocará entre los inversores hará crecer la economía a un ritmo superior al previsto en el presupuesto, y que ello permitirá reducir la alta desocupación.
Asimismo, el ministro sostuvo que gracias al blindaje, ahora “nadie puede tener dudas o tener desconfianza sobre qué va a pasar con los impuestos” y afirmó que “los impuestos, si van para algún lado, es para abajo, lo hemos empezado a hacer, y no hay sorpresas, porque tenemos financiamiento”.
Sin embargo, el secretario de Finanzas, Daniel Marx, había afirmado que si bien el blindaje ayudará a tranquilizar a los mercados, “la situación argentina no cambiará de inmediato”.
Además, contra los buenos augurios del Gobierno choca de lleno un informe presentado durante el fin de semana por la Fundación Capital, en el que se detalla que la asistencia financiera que lidera el FMI tan sólo sirve para ahuyentar el fantasma de la cesación de pagos en 2001.
(DYN). – El Gobierno obtuvo un monumental blindaje financiero de US$ 39.700 millones, de acuerdo con lo anunciado hoy (lunes 18) por el presidente Fernando de la Rúa.
El Presidente de la Rúa afirmó que la ayuda financiera internacional “tiene una importancia inusitada” que permitirá al país “encarar la recuperación económica”.
Según lo programado, de los US$ 39.700 millones, 25.400 millones se desembolsarán hasta el 31 de diciembre de 2001 y en lo que resta del año en curso estarán disponibles 2.100 millones, explicó el ministro de Economía, José Luis Machinea.
A partir de este momento, la estrategia del gobierno nacional –aseguró Machinea– será “esperar” hasta que los mercados estén dispuestos a financiar al país a “tasas razonables”.
La composición del blindaje es la siguiente: US$ 13.700 millones aportados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), 2.500 millones por el Banco Mundial, otros 2.500 millones por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), 1.000 millones por España, 10.000 millones por un conjunto de bancos privados, 3.000 millones por las AFJP y 7.000 millones por operaciones de canje de deuda.
De la Rúa retomó esta mañana su costumbre –últimamente delegada en el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo– de encabezar la reunión de ministros, esta vez realizada en la quinta de Olivos, para evaluar la instrumentación de la ayuda financiera.
Al ingresar al encuentro, la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, vaticinó una “baja significativa” en la tasa de desocupación a partir de este blindaje.
“No quiero dar números, pero creemos que va a haber una baja significativa del desempleo. Si ahora se aprovecha este impulso positivo se va a ver reflejado rápidamente en la baja de las cifras de la desocupación”, sostuvo Bullrich.
En declaraciones a la prensa, Bullrich señaló que “si logramos rápidamente que se baje la tasa de interés, lo que significa que se empiece a mover la economía, sobre todo las Pymes, creemos que hay muchos pequeños inversores, comercios y servicios que este año no tomaron decisiones y que las van a tomar”.
Machinea, por su parte, se refirió en el mismo sentido, en un diálogo con el canal de cable Todo Noticias, al considerar que la confianza que el blindaje provocará entre los inversores hará crecer la economía a un ritmo superior al previsto en el presupuesto, y que ello permitirá reducir la alta desocupación.
Asimismo, el ministro sostuvo que gracias al blindaje, ahora “nadie puede tener dudas o tener desconfianza sobre qué va a pasar con los impuestos” y afirmó que “los impuestos, si van para algún lado, es para abajo, lo hemos empezado a hacer, y no hay sorpresas, porque tenemos financiamiento”.
Sin embargo, el secretario de Finanzas, Daniel Marx, había afirmado que si bien el blindaje ayudará a tranquilizar a los mercados, “la situación argentina no cambiará de inmediato”.
Además, contra los buenos augurios del Gobierno choca de lleno un informe presentado durante el fin de semana por la Fundación Capital, en el que se detalla que la asistencia financiera que lidera el FMI tan sólo sirve para ahuyentar el fantasma de la cesación de pagos en 2001.