(EFE).- El secretario de Estado de Estados Unidos, Colin Powell, insistió hoy (domingo 8) en que las negociaciones con China por el incidente del avión espía retenido en Hainan “están avanzando”, pero admitió que las relaciones con ese país han resultados “dañadas”.
En declaraciones a varias cadenas de televisión, Powell y el vicepresidente de Estados Unidos, Richard Cheney, reiteraron hoy que este país no va a pedir disculpas por la colisión entre el avión espía y un caza chino, como ha pedido Pekín, y consideraron que cada día que pasa aumenta el riesgo de que empeoren las relaciones con China.
“Las relaciones con China han resultado dañadas”, reconoció el secretario de Estado.
“Hay que acabar con este asunto tan pronto como sea posible” para “minimizar el daño a nuestras relaciones”, agregó.
Powell dijo que el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, está “involucrado desde el primer día” en la resolución del incidente y ha escrito una carta a la viuda del piloto chino en la que muestra su pesar “por la pérdida de su marido”, pero insistió en que este país no prevé pedir disculpas.
Las autoridades chinas “saben que no se contempla una disculpa en este momento y que se está buscando una fórmula distinta, por lo que se están produciendo intensas negociaciones”, dijo Powell a la cadena de televisión Fox News.
También el vicepresidente de Estados Unidos rechazó que Washington vaya a pedir disculpas.
El domingo pasado, un avión espía estadounidense EP-3 colisionó en el aire con un caza chino, lo que causó la desaparición del piloto chino y que el aparato norteamericano tuviese que realizar un aterrizaje de emergencia en Hainan, donde está retenido desde entonces con sus 24 tripulantes.
Powell destacó que el deterioro de las relaciones bilaterales puede acabar si se libera a los 24 tripulantes del avión espía de Estados Unidos.
“El hecho de que tengamos un desacuerdo con el Gobierno chino no tiene nada que ver con la tripulación”, aseguró el jefe de la diplomacia estadounidense sobre los 24 retenidos en Hainan, a los que algunos congresistas y la prensa comienzan a llamar en Estados Unidos “rehenes”.
Powell comentó que “no he visto ninguna prueba que sugiera que nuestro avión hizo algo incorrecto o que causara el accidente”.
El litigio entre China y Estados Unidos provocado por el avión espía retenido en Hainan entra hoy en su segunda semana sin visos de que vaya a superarse el estancamiento de forma inmediata, pues Pekín sigue reclamando una disculpa y Washington cree que no hay razones para ello.
(EFE).- El secretario de Estado de Estados Unidos, Colin Powell, insistió hoy (domingo 8) en que las negociaciones con China por el incidente del avión espía retenido en Hainan “están avanzando”, pero admitió que las relaciones con ese país han resultados “dañadas”.
En declaraciones a varias cadenas de televisión, Powell y el vicepresidente de Estados Unidos, Richard Cheney, reiteraron hoy que este país no va a pedir disculpas por la colisión entre el avión espía y un caza chino, como ha pedido Pekín, y consideraron que cada día que pasa aumenta el riesgo de que empeoren las relaciones con China.
“Las relaciones con China han resultado dañadas”, reconoció el secretario de Estado.
“Hay que acabar con este asunto tan pronto como sea posible” para “minimizar el daño a nuestras relaciones”, agregó.
Powell dijo que el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, está “involucrado desde el primer día” en la resolución del incidente y ha escrito una carta a la viuda del piloto chino en la que muestra su pesar “por la pérdida de su marido”, pero insistió en que este país no prevé pedir disculpas.
Las autoridades chinas “saben que no se contempla una disculpa en este momento y que se está buscando una fórmula distinta, por lo que se están produciendo intensas negociaciones”, dijo Powell a la cadena de televisión Fox News.
También el vicepresidente de Estados Unidos rechazó que Washington vaya a pedir disculpas.
El domingo pasado, un avión espía estadounidense EP-3 colisionó en el aire con un caza chino, lo que causó la desaparición del piloto chino y que el aparato norteamericano tuviese que realizar un aterrizaje de emergencia en Hainan, donde está retenido desde entonces con sus 24 tripulantes.
Powell destacó que el deterioro de las relaciones bilaterales puede acabar si se libera a los 24 tripulantes del avión espía de Estados Unidos.
“El hecho de que tengamos un desacuerdo con el Gobierno chino no tiene nada que ver con la tripulación”, aseguró el jefe de la diplomacia estadounidense sobre los 24 retenidos en Hainan, a los que algunos congresistas y la prensa comienzan a llamar en Estados Unidos “rehenes”.
Powell comentó que “no he visto ninguna prueba que sugiera que nuestro avión hizo algo incorrecto o que causara el accidente”.
El litigio entre China y Estados Unidos provocado por el avión espía retenido en Hainan entra hoy en su segunda semana sin visos de que vaya a superarse el estancamiento de forma inmediata, pues Pekín sigue reclamando una disculpa y Washington cree que no hay razones para ello.