EEUU: no habrá recuento manual
Aun no hay definiciones, pero a la versión que indicaba que los votos se contarían manualmente en Florida, se opuso ahora un pedido hecho por los republicanos a un juez, a fin de que prohiba esa posibilidad.
(EFE) La disputa electoral por Florida adquirió hoy (sábado 11) una nueva y peligrosa dimensión cuando los republicanos pidieron a un juez federal que prohíba un recuento manual de los votos en tres condados.
El anuncio fue hecho por James Baker, ex secretario de estado y representante personal del candidato republicano, George W. Bush, en Tallahasse, capital del estado.
Los condados de Palm Beach y Volusia tenían programado empezar hoy (sábado 11) un recuento manual de las elecciones presidenciales a petición de los demócratas.
Baker dijo que después de dos recuentos automatizados de los votos en todo el estado, “ya es tiempo de reconocer que George W. Bush ganó Florida” y que todo está pendiente de los votos por correo del extranjero que deben llegar antes del próximo viernes.
El representante de Bush dijo que un recuento manual está sujeto a errores humanos y que en algunos casos podría dar lugar a que algunos supervisores electorales tengan que tomar una decisión subjetiva para poder interpretar votos dudosos.
Los condados donde estaban programado el recuento son bastiones fuertes de los demócratas y estos esperan que al hacerlo de un manera manual pudieran salir mas votos para su candidato.
Baker subrayó que si los votos por correo llevan a una victoria demócrata, “los republicanos aceptaríamos y respetaríamos esa decisión”.
A pesar que Gore supera a Bush en voto popular y electoral, a nivel nacional, los 25 votos electorales de Florida podrían dar a Bush los 270 necesarios para llegar a la Casa Blanca.
El interdicto solicitado por los republicanos fue presentado ante un tribunal federal de Orlando y se espera que un juez de guardia lo estudie hoy mismo.
Baker reconoció que el partido republicano ha tomado esta decisión con pesar, “porque la elección debe ser dejada en manos del pueblo, no de los tribunales”.
Para él, un recuento manual está mas sujeto a errores que uno hecho de una forma automatizada por computadoras porque “estas máquinas no son ni demócratas ni republicanas y, por lo tanto, no pueden tener prejuicios políticos”.
En Palm Beach, los funcionarios electorales seguían haciendo los preparativos para comenzar el recuento manual que solo se había atrasado por la llegada de las urnas.
En Palm Beach, donde predomina una larga comunidad de jubilados judíos que suelen votar por los demócratas, el recuento manual solo se haría de tres centros de votación con una suma total no superior a 3.000 votos.
Sin embargo en Volisia, al norte de Palm Beach, el recuento manual sería en total, de mas 180.000 votos.
Los centros de votación han sido seleccionados por los demócratas y los supervisores electorales tendrían libertad para interpretar si los votos que fueron declarados nulos por el recuento automatizado, pueden ser contados, si hay muestra física en la papeleta de que el votante no perforó completamente un hoyito con su preferencia.
Los republicanos, según analistas políticos, quieren evitar este recuento manual a toda costa conscientes que pueden salir mas votos para los demócratas que puedan ayudar a superar la ligera ventaja que tiene Bush en el estado.
Doug Hattaway, portavoz de la campaña demócrata, dijo que su partido estima que el recuento debe seguir adelante y que no veían ninguna razón para que la voluntad del pueblo no sea tenida en cuenta.
(EFE) La disputa electoral por Florida adquirió hoy (sábado 11) una nueva y peligrosa dimensión cuando los republicanos pidieron a un juez federal que prohíba un recuento manual de los votos en tres condados.
El anuncio fue hecho por James Baker, ex secretario de estado y representante personal del candidato republicano, George W. Bush, en Tallahasse, capital del estado.
Los condados de Palm Beach y Volusia tenían programado empezar hoy (sábado 11) un recuento manual de las elecciones presidenciales a petición de los demócratas.
Baker dijo que después de dos recuentos automatizados de los votos en todo el estado, “ya es tiempo de reconocer que George W. Bush ganó Florida” y que todo está pendiente de los votos por correo del extranjero que deben llegar antes del próximo viernes.
El representante de Bush dijo que un recuento manual está sujeto a errores humanos y que en algunos casos podría dar lugar a que algunos supervisores electorales tengan que tomar una decisión subjetiva para poder interpretar votos dudosos.
Los condados donde estaban programado el recuento son bastiones fuertes de los demócratas y estos esperan que al hacerlo de un manera manual pudieran salir mas votos para su candidato.
Baker subrayó que si los votos por correo llevan a una victoria demócrata, “los republicanos aceptaríamos y respetaríamos esa decisión”.
A pesar que Gore supera a Bush en voto popular y electoral, a nivel nacional, los 25 votos electorales de Florida podrían dar a Bush los 270 necesarios para llegar a la Casa Blanca.
El interdicto solicitado por los republicanos fue presentado ante un tribunal federal de Orlando y se espera que un juez de guardia lo estudie hoy mismo.
Baker reconoció que el partido republicano ha tomado esta decisión con pesar, “porque la elección debe ser dejada en manos del pueblo, no de los tribunales”.
Para él, un recuento manual está mas sujeto a errores que uno hecho de una forma automatizada por computadoras porque “estas máquinas no son ni demócratas ni republicanas y, por lo tanto, no pueden tener prejuicios políticos”.
En Palm Beach, los funcionarios electorales seguían haciendo los preparativos para comenzar el recuento manual que solo se había atrasado por la llegada de las urnas.
En Palm Beach, donde predomina una larga comunidad de jubilados judíos que suelen votar por los demócratas, el recuento manual solo se haría de tres centros de votación con una suma total no superior a 3.000 votos.
Sin embargo en Volisia, al norte de Palm Beach, el recuento manual sería en total, de mas 180.000 votos.
Los centros de votación han sido seleccionados por los demócratas y los supervisores electorales tendrían libertad para interpretar si los votos que fueron declarados nulos por el recuento automatizado, pueden ser contados, si hay muestra física en la papeleta de que el votante no perforó completamente un hoyito con su preferencia.
Los republicanos, según analistas políticos, quieren evitar este recuento manual a toda costa conscientes que pueden salir mas votos para los demócratas que puedan ayudar a superar la ligera ventaja que tiene Bush en el estado.
Doug Hattaway, portavoz de la campaña demócrata, dijo que su partido estima que el recuento debe seguir adelante y que no veían ninguna razón para que la voluntad del pueblo no sea tenida en cuenta.
