La Cámara de Representantes de Estados Unidos, que se encuentra controlada por el oficialismo, aprobó ayer (jueves 8) el plan de reducción impositiva del presidente Bush.
El proyecto, que es la columna vertebral del nuevo mandatario, fue aprobado por 230 votos a favor y 198 en contra con diez representantes demócratas que se unieron a la mayoría republicana.
La aprobación se produjo en medio de objeciones de varios legisladores demócratas, quienes alegaron que el recorte era muy amplio y se orientaba únicamente a los contribuyentes de ingresos altos.
En la Cámara Alta, donde la suerte del proyecto promete ser más problemática, la votación no tendrá lugar hasta mayo.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos, que se encuentra controlada por el oficialismo, aprobó ayer (jueves 8) el plan de reducción impositiva del presidente Bush.
El proyecto, que es la columna vertebral del nuevo mandatario, fue aprobado por 230 votos a favor y 198 en contra con diez representantes demócratas que se unieron a la mayoría republicana.
La aprobación se produjo en medio de objeciones de varios legisladores demócratas, quienes alegaron que el recorte era muy amplio y se orientaba únicamente a los contribuyentes de ingresos altos.
En la Cámara Alta, donde la suerte del proyecto promete ser más problemática, la votación no tendrá lugar hasta mayo.