Lo sorprendente no es que haya sido derrotado Rafael Correa en el referéndum celebrado en Ecuador, donde estaba en juego la futura posible reelección del ex mandatario. Lo que sí sorprendió fue la magnitud de la derrota. Casi dos terceras partes del electorado dijo sí a los siete temas planteados por el gobierno de Lenin Moreno, el sucesor de Correa y además del mismo partido.
Con este resultado, Correa no tiene chance de retornar al sillón presidencial. Su pretensión era que se aprobara un ilimitado número de términos presidenciales, cuando ahora es solamente de dos (los que ya gobernó). Con este nuevo escenario, no podrá presentarse como candidato presidencial en los comicios de 2021.
El referéndum fue convocado por el actual presidente, quien era el número dos de Correa cuando éste era el primer mandatario. Moreno se distancia todavía más de Correa y por lo que parece se queda con la maquinaria de Alianza País, el partido que llevó a ambos al poder.
Otras preguntas de la consulta -todas votadas a favor de la posición del gobierno- son: cárcel para la corrupción en la política; límites a la minería en áreas con ambiente protegido; y fin de las medidas que restringían penas por delitos sexuales contra menores. Algunas de estas respuestas, deberán ser ratificadas por el Congreso.
Para Correa, Lenin Moreno es un traidor. Para el actual presidente, “cuando la gente piensa que un gobierno es para siempre, aparece la corrupción”.
Jorge Glas, que fuera vicepresidente de ambos mandatarios, fue sentenciado el año pasado a seis años de prisión por estar involucrado en las coimas pagadas por la empresa brasileña Odebrecht.