Economía: abril fue el mejor mes en siete años
La economía física repuntó 9,8% en abril, respecto de mayo de 2004. Así señala la estimación mensual de actividad difundida por el Indec. En cuanto al PBI desestacionalizado, avanzó 0,6% sobre marzo.
Como anticipaba Roberto Lavagna, ambos guarismos son hasta ahora los más altos en el año y ubican el nivel de actividad algo por encima del máximo histórico, registrado en mayo de 1998. En ese momento, la estimación mensual marcaba 128,5 puntos, pero debe recordarse –algo que los técnicos oficiales eluden cuidadosamente- que esas estadísticas estaban distorsionadas por la convertibilidad y el maquillaje contable en el banco central (cuando Domingo F.Cavallo era ministro), a partir de 1995/6 y hasta el derrumbe de 2001.
Por otra parte, el Indec persiste en confusiones. Una es hablar de un año y, de inmediato, comparar abril de 2005 con abril de 2004 (o sea, trece meses). Otra es emplear términos innecesarios (“estimador” en lugar de estimación o estimado) o erróneos, vg. “sector automotriz”.
Volviendo al estimado, llegó en abril último a 129,1 puntos. En otras plabras, la econompía real –por ende, el producto bruto interno- parece haber remontado casi toda la fase de recesión, depresión y crisis, sufrida entre fines de 1996 y 2003. La fecha 1998 refleja, simplemente, un máximo que ya era ficticio.
Sea como fuere, el primer cuadrimestre de 2005 acumula 8,5% de crecimiento respectos de un año antes. De paso, sugiere que, tras un primer trimestre algo flojo y pese a problemas energéticos, el ritmo de actividad vuelve a ser razonable (pese a la tortuosa dialéctica neoconservadora en boga). Ese factor explica el cambio de tono evidente en el Fondo Monetario Internacional . De paso, corrillos de Washington hablan de una renuncia o un pase: Anup Singh, cuya trayectoria muestra errores como los de Indonesia, Malasia y Tailandia durante la crisis sistémica internacional de 1997/8.
Como anticipaba Roberto Lavagna, ambos guarismos son hasta ahora los más altos en el año y ubican el nivel de actividad algo por encima del máximo histórico, registrado en mayo de 1998. En ese momento, la estimación mensual marcaba 128,5 puntos, pero debe recordarse –algo que los técnicos oficiales eluden cuidadosamente- que esas estadísticas estaban distorsionadas por la convertibilidad y el maquillaje contable en el banco central (cuando Domingo F.Cavallo era ministro), a partir de 1995/6 y hasta el derrumbe de 2001.
Por otra parte, el Indec persiste en confusiones. Una es hablar de un año y, de inmediato, comparar abril de 2005 con abril de 2004 (o sea, trece meses). Otra es emplear términos innecesarios (“estimador” en lugar de estimación o estimado) o erróneos, vg. “sector automotriz”.
Volviendo al estimado, llegó en abril último a 129,1 puntos. En otras plabras, la econompía real –por ende, el producto bruto interno- parece haber remontado casi toda la fase de recesión, depresión y crisis, sufrida entre fines de 1996 y 2003. La fecha 1998 refleja, simplemente, un máximo que ya era ficticio.
Sea como fuere, el primer cuadrimestre de 2005 acumula 8,5% de crecimiento respectos de un año antes. De paso, sugiere que, tras un primer trimestre algo flojo y pese a problemas energéticos, el ritmo de actividad vuelve a ser razonable (pese a la tortuosa dialéctica neoconservadora en boga). Ese factor explica el cambio de tono evidente en el Fondo Monetario Internacional . De paso, corrillos de Washington hablan de una renuncia o un pase: Anup Singh, cuya trayectoria muestra errores como los de Indonesia, Malasia y Tailandia durante la crisis sistémica internacional de 1997/8.
